Por Saúl Miguel
Con la resaca de las pedaladas sobre el barro aún en el cuerpo, y los débiles ecos del Tour femenino de San Luis y el Ladies Tour of Qatar a modo de prólogo, la primera temporada que acogerá el Women’s WorldTour tiene mañana la cita que, en el sentir de muchos, da el verdadero pistoletazo de salida a la campaña de carretera. El Omloop Het Nieuwsblad surcará por primera vez en 2016 las carreteras belgas salpicadas de muros y adoquines que otorgan el sabor inconfundible de la primavera ciclista, aunque la estación como tal aún quede relativamente lejos.
Aunque no forma parte del mencionado Women’s WorldTour —que nacerá con la disputa de la Strade Bianche en marzo—, Omloop Het Nieuwsblad sube de categoría UCI con esta edición, pasando con buen criterio de 1.2 a 1.1 y, de esta forma, estando más acorde con el incontestable prestigio que conlleva la primera clásica de adoquines del año. Sin embargo, no gozará de televisión en directo, un lujo que sí tendrá la otra clásica del fin de semana, el Omloop van het Hageland, a disputarse el domingo compartiendo buena parte de las protagonistas de la víspera.
Edición 2015: Anna van der Breggen, primer aviso
Cualquiera que haya seguido mínimamente el ciclismo femenino recordará que 2015 fue el año de explosión de Anna van der Breggen. La de Zwolle afrontaba el año con, a priori, la pesada carga de sostener, junto a Pauline Ferrand-Prevot —entonces de arcoíris—, la responsabilidad del liderato de un Rabobank-Liv que no iba a poder contar con Marianne Vos, apartada de las carreteras por esa larga lesión de la que promete estar ya recuperada. Sus caminos fueron opuestos. Si la francesa confesó en más de una ocasión que el peso del maillot arcoíris influyó negativamente en su rendimiento, la de Zwolle desató toda la calidad que venía apuntando desde sus primeros destellos allá por mediados de 2012, cuando era una total desconocida. Un lejano ataque junto a Ellen van Dijk (Boels-Dolmans) y un certero sprint a dos en la traicionera llegada de Gante le dieron la primera de una larga lista de victorias que terminarían coronándola como la corredora del año.
Recorrido
Clásico recorrido con un pequeño cambio. La clásica llegada en Sint-Piepersplein será sustituida por una nueva en Emile Clauslaan, siempre sin salir de Gante. Para llegar hasta allí, 9 cotas y 5 tramos llanos de pavés se encangarán de realizar la selección, una selección que probablemente se concentre entre los kilómetros 79 y 103 de la prueba, gracias al encadenado de los muros Wolvenberg y Molenberg, tras los que se sucederán los adoquines planos de Paddestraat, Lippenhovenstraat y Lange Munte. En total, 124 fascinantes kilómetros con la llegada prevista entre las 14:45 y las 15:08.
Favoritas
Como de costumbre, y más en año olímpico, con la mirada puesta en el lejano horizonte veraniego, los estados de forma a estas alturas de año son una incógnita. Qatar, en cualquier caso, dejó alguna pista positiva sobre varias favoritas. Ellen van Dijk (Boels-Dolmans) ya ha sido dos veces segunda en el Omloop Het Nieuwsblad y parece llegar en condiciones para lograr su primer triunfo en esta clásica. Su equipo cuenta, además, con otras dos aspirantes de similar categoría: Chantal Blaak y Lizzie Armitstead. La británica, además, estrenará el flamante arcoíris logrado en Richmond. Sin olvidar, claro está, a Megan Guarnier, podio en 2013.
El todopoderoso Wiggle-High5 cuenta ni más ni menos que con Emma Johansson para asaltar lo que supondría un tercer trofeo en esta carrera para la sueca. Amy Pieters y Elisa Longo Borghini actuarán como escuderas de lujo o alternativas igualmente válidas, si bien la italiana viene de recuperarse de unas semanas recientes en las que la salud no le ha acompañado. No menos potente parece RaboLiv, encabezado por Van der Breggen y su dorsal número 1, bien secundada, entre otras, por Lucinda Brand y Kasia Niewiadoma.
Canyon-SRAM cuentan con la vencedora de la edición 2013, Tiffany Cromwell, para quien sería muy importante un gran resultado de cara a recuperar la confianza, tal vez perdida tras no terminar de culminar su presumible progresión en las últimas campañas. Trixi Worrack y Lisa Brennauer pueden actuar como peligrosas outsiders. Fuera de estos equipos, nombres individuales como Annemiek van Vleuten (Orica-AIS), Floortje Mackaij (Liv-Plantur) o Shelley Olds (Cylance Pro Cycling) también aspiran a lo máximo. El el equipo de Olds también se encuentra Sheyla Gutiérrez, que aporta un notable toque español a la prueba junto a la presencia de los equipos Bizkaia-Durango y Lointek. No estaría de más tampoco seguir atentamente las evoluciones de la jovencísima Evie Richards, recientemente coronada como ganadora del Mundial sub-23 de ciclocrós, que vestirá los colores de la selección británica.