Primoz Roglic (Lotto-NL Jumbo) se ha alzado con la victoria final de la Vuelta al País Vasco (2.UWT, España) tras la disputa de la última y decisiva etapa con llegada en el Santuario en Arrate y en la que se ha impuesto, de manera magistral, un combativo Enric Mas (Quick-Step Floors). Landa, segundo, y Ion Izagirre, tercero, completaron el pódium final.
Con la esperanza de poder repetir la proeza de Omar Fraile, quien venció en la jornada de ayer tras ser participante y rematador de una numerosa escapada, fueron muchos los corredores que hoy, ya de salida, quisieron ser parte de la fuga del día. Verona, Geoghean, Hansen, Rojas, Mühlberger, Rojas, Betancur, De Gendt, Hamilton, Gorka Izagirre, Enric Mas, David López, Madouas o Ilnur Zakarin eran algunos de los 11 corredores que pronto tomaron ventaja respecto al pelotón.
Con una renta nunca superior a los cuatro minutos, por detrás fue Movistar quien endureció las últimas ascensiones de esta edición. La diferencia decrecía y mientras Carlos Verona se apuntaba la clasificación de la montaña, el pelotón rodaba ya a menos de un minuto y medio.
Mas, Verona, De Gendt y Mühlberger eran los más fuertes entre los fugados y coronaban Urkaregi con 37” de renta sobre un pelotón en el que ya no rodaba Julien Alaphilippe. La diferencia era escasa y más aun cuando se esperaba un demarraje de Mikel Landa.
El alavés no defraudó y lanzó su ataque en las primeras rampas de Arrate. De escalador puro, su demarraje asfixio a un Roglic que, aun cediendo en meta más de un minuto, no tendría problemas en defender su liderato. Landa quería el triunfo de etapa y uno a uno fue neutralizando a todos los fugados. A todos, menos a uno.
Un poderoso Enric Mas volaba, entre la niebla y una fina lluvia, hacia uno de esos triunfos que seguro que no olvidará. El de Quick-Step había lanzado su órdago a falta de 4 kilómetros para el final con el pelotón a menos de 30 segundos y nadie, ni siquiera Landa, pudo echarle mano.