La sonrisa de Dylan Jiménez brilló este sábado más que nunca en Baranbio. El ciclista costarricense del Equipo Lizarte estrenó su palmarés con la formación rosa con un auténtico recital en el Andra Mari Txiki Saria, antepenúltima manga del Torneo Lehendakari. Su triunfo lo aderezó con la segunda plaza Pablo Castrillo. Por si fuera poco, en la tercera etapa de la XII Volta a la Provincia de València, que se llevó Montoli (EOK), Pablo Carrascosa dinamitó la carrera para ponerse líder de la ronda con solo una jornada por delante.
La escuadra rosa lo bordó en tierras guipuzcoanas con una estrategia perfecta. Primero, metiendo a Dylan Westley en una peligrosa fuga de nueve corredores que a punto estuvo de lograr la machada. Y, después, una vez se suprimió la avanzadilla, escogiendo el punto clave de la subida final para los demarrajes de Castrillo y de un Jiménez que secó a los perseguidores del aragonés para alcanzarle después.
Para Dylan Jiménez, esta victoria es “muy especial” por tratarse no solo de la primera en Europa, sino también el estreno en una prueba en línea de un hombre acostumbrado a triunfar en las cronos. “Estoy muy feliz. Llevaba rozándola unas semanas y quería conseguirla antes de terminar el año. El equipo ha realizado un grandísimo trabajo. Este triunfo va para mi familia de Costa Rica, a la que extraño y espero ver en pocas semanas cuando termine el curso”, celebra.