Un año más, con la llegada del ocaso de la temporada amateur, desde ElPelotón, y con el patrocinio de Oria Sport Wear, volvemos a sacar a la palestra nuestro «siete ideal élite», en una campaña 2021 muy especial por haber sido la del regreso a la competición tras un 2020 realmente duro para nuestros ciclistas, directores, organizadores, prensa y todas las personas que hacen posible que en todos los rincones de nuestro país durante más de 7 meses haya ciclismo semana tras semana.
Para liderar a nuestro septeto élite nos quedamos con Benjamí Prades, el corredor que más triunfos ha cosechado este año dentro del pelotón amateur, protagonizando un final de campaña soberbio en el que ha ido acumulando primeros puestos allá a donde iba, siendo el principal artífice de que su equipo, el Vigo-Rías Baixas, haya acabado en lo más alto del ránking nacional por escuadras de la Real Federación Española de Ciclismo. Él mismo terminó en el podium individual dentro de esa clasificación, solo superado por su compañero Miguel Ángel Fernández y Pablo Alonso (Supermercados Froiz), y sobre todo con la gran alegría de levantar los brazos en varias ocasiones con los colores acreditativos de ser el campeón de España élite en este 2021.
Pero adentrémonos un poquito más en profundidad en el año 2021 para el ciclista de Alcanar. Los inicios no fueron fáciles, y es que Prades regresaba a España tras 8 temporadas como profesional en Japón, lugar donde cosechó sus éxitos más sonoros en las carreras más importantes del continente asiático como el Tour de Japón o el Tour de Taiwán. Además, volvía a España para recalificarse como corredor aficionado en el conjunto gallego del Vigo-Rías Baixas, y ese paso para cualquiera nunca es fácil.
El catalán iniciaba el año en su tierra, disputando fin de semana tras fin de semana las pruebas de las Grans Clàssiques, donde, como él mismo nos contará, las primeras citas fueron un auténtico sufrimiento para él con el fuerte ritmo que se imponía desde el inicio en cada carrera. Poco a poco Benjamí fue recuperando su mejor forma, y aún no estando en su versión más excelsa, la calidad que atesora le valió para subirse al podium en varias de las mangas de la competición catalana, como así ocurrió ya a mediados de marzo en la carrera de Olot, donde finalizó en segunda posición, primer podium del año para el equipo gallego, o más adelante al ser tercero en Perafort. De hecho, sus buenos resultados le valieron para liderar la general de esas Grans Clàssiques en algún momento del año.
Precisamente en Cataluña sería donde Benjamí Prades subiría por primera vez a lo más alto del podium, tras llevarse en la Clásica Isaac Galvéz el título autonómico en categoría élite. Ya nos encontrábamos en mayo, y Prades comenzaba a dar muestras de lo que se venía por delante, y es que con la llegada del calor y el verano, el hermano de otro gran ciclista como Edu Prades (corredor que pasó por Caja Rural-RGA y Movistar, y que en 2021 ha militado en el equipo francés del Delko), iniciaría su verdadera senda triunfal que le ha hecho acabar registrando unos fantásticos números, demostrando que perfectamente podría estar dentro del campo profesional.
La primera de las picas la pondría en la Ronda del Maestrazgo de Benicarló, carrera que volvía este 2021 a escena tras varios años de ausencia, haciéndolo además con una participación de lujo al celebrarse un día después del vecino Memorial Momparler de la Copa de España. En una mañana durísima y calurosa, el pupilo del equipo gallego presidido por José Luis Chamorro, acababa siendo el más rápido del quinteto de corredores que alcanzaba la recta final destacado, superando en los metros finales a grandes nombres como José María Martín (Valverde-Terra Fecundis), Alex Franco (Caja Rural-RGA) o Edu Pérez-Lancaluce (Eolo-Kometa).
7 días después conseguiría uno de los grandes objetivos del año: ser campeón de España élite. Lo haría en uno de los itinerarios más duros que se recuerda en unos nacionales como fue esa prueba en La Nucía, aguantando con los más destacados profesionales del World Tour como Omar Fraile, Luis León Sánchez, Pello Bilbao, David de la Cruz, Carlos Rodríguez Jesús Herrada o Gonzalo Serrano, hasta los últimos 20 kilómetros. Finalmente conseguía un más que meritorio 20º puesto que le acreditaba ese entorchado en la categoría élite, aunque en un primer momento él no se encontraba satisfecho con lo realizado porque quería haber estado con los mejores hasta la línea de meta. Demostración clara de su ambición y hambre.
Tras colgarse ese oro en tierras levantinas, Prades se adentraría en los meses de las vueltas por etapas, y ahí sí alcanzaba su plenitud este año. Ese periplo comenzaba en tierras zamoranas, donde además de jugar a meterse en fugas durante la Vuelta a Zamora, el catalán era un pilar esencial para que su compañero Miguel Ángel Fernández se hiciera con sendas victorias en una de las etapas de la ronda zamorana con final en Benavente o en el Trofeo Ayuntamiento de Zamora, actuando como «guía y jefe de operaciones» en cada una de las jornadas. Podemos decir que Benjamí Prades se convirtió, estando encima de la bicicleta, en una prolongación de su director Marcos Serrano, pasando a ser un apoyo esencial para el resto de hermanos de fatigas del Vigo-Rías Baixas, y un perfecto consejero y educador para, sobre todo, los corredores más jóvenes de la escuadra gallega. Además, en el siempre prestigioso e histórico Trofeo Muelas del Pan se permitía el lujo de ser el mejor de su formación entrando en el grupo de los gallos, por detrás de la fuga que se jugó el triunfo.
Ahí se tomó un pequeño respiro, para regresar más fuerte que nunca y comenzar su septiembre de vendimia, cosechando una de las rachas más exitosas que recordamos dentro del calendario élite y sub-23. Despertaba el mes del fin del verano con la Vuelta a Cantabria, donde el puestómetro de la primera jornada evitó un triunfo final en la general, y es que en el sprint de Maliaño el del Vigo-Rías Baixas «solo» podía ser 27º, tras formar parte de la escapada buena del día. Esa posición impediría que quedase más arriba en la lucha por el amarillo, ya que en la segunda etapa sí lograba hacerse con el triunfo en Vioño de Piélagos, tras atacar duramente en el muro final al Cementerio de Salcedo, llegando a meta en un grupo muy selecto de ciclistas donde volvería a imponer su gran punta de velocidad. La carrera acabaría con un recorrido montañoso pasando por puertos míticos como La Braguía y El Caracol, con Prades estando siempre con los mejores, peleando por la gloria en la subida final a las Cuevas del Monte Castillo, en Puente Viesgo, cuya meta veía que únicamente Calum Johnston era mejor que él.
#VueltaCantabria. Benjamín Prades gana la segunda etapa de la @vueltacantabria, un sprint reducido en un final ratonero. Vicente Hernaiz, tercero en la meta de Vioño.
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Se resarciría una semana después haciéndose con la general de la Volta a la Provincia de València, donde no conseguía anotarse ningún parcial, pero constataba en las dos citas claves ser el más fiable. En las duras segunda y tercera etapas, Prades entraba en meta en segunda posición, picando los segundos necesarios que le acabarían valiendo para hacerse por fin con la general de una ronda por etapas que parecía se le estaba resistiendo. Aún así, el catalán seguía mostrando cierta insatisfacción por haber estado de nuevo tan cerca de mojar en dos de las cuatro etapas, y es que el segundo día de la vuelta valenciana era superado en la misma línea de llegada de Estivella por José David Martínez «Peque» (Brócoli Mecánico), cogiéndose el campeón de España élite un cabreo morrocotudo después de dejar claro que en la durísima ascensión al Garbí era el más fuerte. 24 horas después volvería a sentir unas emociones parecidas cuando en Titaguas era el italiano Walter Calzoni (Gallina Ecotek) el hombre que le privaba de saborear las mieles del triunfo, aunque aquí sí conseguía acabar sonriendo tras hacerse con el liderato que ya sostendría en la jornada final con meta en Moncada.
Esas mieles le estaban esperando en Extremadura. Tras 10 años de ausencia la Vuelta a Extremadura retornaba a los ruedos, y sin duda la gran figura del escalafón acabaría siendo Benja Prades, que capitaneaba el pleno de victorias que acabaría realizando el Vigo-Rías Baixas en los tres parciales de la ronda extremeña. De nuevo, su partenaire Miguel Ángel Fernández sería el ganador del primer día con meta en Olivenza, donde Prades volvía a realizar una gran labor para que esto sucediese, y guardándose sus balas para erigirse como gran héroe en las dos siguientes fechas. Sería en la segunda etapa con final en la exigente y empedrada subida al Castillo de Trujillo donde Prades con un fortísimo demarraje forjaría su triunfo en la Vuelta a Extremadura, y es que ninguno de sus rivales podía seguirle, presentándose en solitario en meta para levantar los brazos, por fin, como vencedor del día y además colocándose como líder de la carrera. No sería esto suficiente para el catalán, que unas horas después volvía a repetir, venciendo además de amarillo para ratificar su corona extremeña en un espectacular sprint de un selectísimo grupo, tras una durísima etapa por el norte de Cáceres, y con llegada en Hervás.
#VueltaExtremadura. Nueva victoria del Vigo-Rias Baixas. Benjamí Prades se impone en la meta de Trujillo, final de la segunda etapa de la @vuelta_ex.
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De hecho la provincia cacereña sería de nuevo su última víctima. Regresaba el Vigo-Rías Baixas con Benjamí Prades como estrella una semana después a disputar la Vuelta al Tajo Internacional con la que se despedía la temporada amateur, y en la última de sus dos jornadas, el campeón de España élite volvía a evidenciar su superioridad en llegadas explosivas picando para arriba, venciendo con suma claridad en la llegada masiva que resolvió el Gran Premio Ayuntamiento Mata de Alcántara. Colofón espectacular para una temporada difícilmente igualable.
Ahora llega el invierno, momento de desconexión para Benjamí Prades y disfrutar del resto de sus aficiones, pero evidentemente con un ojo puesto siempre en el teléfono, a la espera de una llamada que le pueda devolver al lugar, que por el nivel demostrado, igual no debería haber abandonado.
SIETE IDEAL HASTA EL MOMENTO
SUB-23
1. Mar Brustenga (Caja Rural-RGA)
A) Análisis de la temporada 2021
B) Test de ElPelotón-Ikolan Sports a Marc Brustenga: «Mi sueño es disputar una Paris-Roubaix»