Desde que me levanté pensé que hoy sería un buen día, he podido descansar mejor que ningún día y pensaba que me notaba con fuerzas, aunque estas sensaciones se esfumaron en los primero kilómetros, dónde se salió a fuego y incluso antes de llegar al primer puerto me había quedado yo sola cortada del pelotón super abatida. Fue ahí donde pensé que ya lo había perdido todo, todo el trabajo de etapa por etapa se esfumada en un mal día. No sé cómo pude tomar un aire, cambiar mentalidad y morir encima de la bicicleta, cuesta arriba y entre coches pude meterme de nuevo en el pelotón y a duras penas ir avanzando en este para que no volviera a pasar. Aquí mi mentalidad cambió, estoy en mi primera Bira, última etapa, estoy con las mejores y he de morir luchando encima de la bici. Eso pensé a partir de ese «fallo».
La carrera estuvo a un listón alto, terreno constantemente rompepiernas, con tres puertos y a un ritmo frenético. Pasámos el segundo puerto y la carrera no paraba, de cara al tercero sabíamos que todo se iba a decidir ahí, así que solo quedaba hacer la mejor subida de mi vida y darlo todo. Así fue, empezaron los ataques y ya cada una se defendía como pudo, logré aguantar muriendo y dándolo todo en un pelotón de unas diez chicas porque sabía que así sacaría el máximo tiempo a Demi de Jong (líder hasta entonces de la general de jóvenes), quien se había quedado de este. Una vez coronado, 6 km a meta eternos y agónicos, pero que valieron la pena: ¡¡¡maillot para casaaa!!!
Ilusión, alegría, motivación, recompensa… una graaaan y enorme recompensa es este maillot y no solo este sino el resultado en general de la Bira, con un 23.° puesto en la general y mucho aprendido y, sobre todo, sufrido. De esta, mi primera vuelta y mi primera Bira me llevo los grandes días de competición, el honor de correr y compartir pelotón con grandes y admiradas corredoras y esta semana junto a mi escuadra magnífica de Lointek, quienes me han ayudado a que aprenda de cada error o fallo que he cometido, quiénes me han dicho los errores que he cometido y que por supuesto trataré de ir mejorando carrera tras carrera. Así que vamos dando pasitos pequeños pero que espero que en buena dirección, ahora a descansar, pensar y recapacitar sobre cada carrera ¡¡y por supuesto a seguir trabajando!!
Cristina Martínez, Lointek Team