Chris Horner (Radioshack) volvió a repetir por segunda vez en esta Vuelta a España, en esta ocasión dando un auténtico recital en la primera etapa de montaña de verdad con un ataque demoledor que quitó la pegatina a todos sus rivales. Con esta victoria en la subida inédita, dura y preciosa de Hazallanas el americano se sitúa como líder de la ronda española con una amplia ventaja de 50″ sobre Vincenzo Nibali que fue el otro corredor más ambicioso en el día de hoy, de cara a la contrarreloj individual del próximo miércoles, demostrando con ello que ha sido el mejor de largo de esta primera parte de la Vuelta a España.
Último día antes de la primera jornada de descanso que cubría en un principio 186 kilómetros entre Torredelcampo y el alto de Hazallanas, de categoría especial. Digo en principio porque la organización tuvo que alargar la salida neutralizada al producirse dos caídas de bastante consideración en la misma provocando los abandonos de Guillaume Boivin (Cannondale), Alberto Losada (Katusha) o Bart de Clercq (Lotto) entre otros muchos damnificados.
Una vez reiniciada la carrera y con muchos corredores con el susto en el cuerpo se formó la fuga del día de galones con nombres como Flecha y Marczynski (Vacansoleil), Ulissi (Lampre), Preidler (Argos-Shimano), Meersman (Omega Pharma), Paterski (Cannondale), Martin Kohler (BMC), Oroz (Euskaltel-Euskadi), Sijmens (Cofidis) y Clement (Belkin). El polaco, Marczynsky fue el que más lejos llevó la fuga hasta la última parte de la subida de Hazallanas, engullido por el grupo del líder en el momento en que Igor Antón (Euskalte-Euskadi) encendía la mecha.
Antes durante la dura subida de Monachil pudimos ver el movimiento extraño de Alejandro Valverde y Movistar que tan pronto estaban cerrando el grupo como pusieron un ritmo en cabeza de pelotón brutal durante la subida con Jose Herrada y Silvester Smyzd volviendo a hacer de las suyas dejando patente que tanto Haimar Zubeldia (Leopard) como Leopold Konig (Netapp) no tenían su día después de haber sido participes de la dura caída en el comienzo de la jornada.
Ya en Hazallanas los hombres de Movistar siguieron poniendo un duro ritmo en la subida que junto con el cambio provocado por Igor Antón hacía que el líder Dani Navarro (Katusha) en las duras rampas de hasta el 20% a falta de 6 kilómetros se descolgara y se pusiera «en venta» su maillot rojo. En cabeza quedaban tan sólo Valverde, Basso, Nibali, Purito, Pozzovivo y Horner, y en el momento en que Pozzovivo y Valverde mostraban su momento de crisis, el estadounidense aprovechaba para soltar su hachazo e irse en solitario en busca de la gloria. Quedaban por delante más de 4 kilómetros de exhibición a la americana en la que la ventaja iba incrementándose continuamente y que ni el propio Nibali cuando saltó a falta de 2 kilómetros para la meta y dejó atrás a sus mayores rivales, Joaquím y Alejandro, fue incapaz de reducir ni un segundo la diferencia de 50″ que había alcanzado el veterano corredor de Leopard. Por detrás Purito y Valverde volvieron a luchar por ver quién era el más rápido de los dos en los últimos metros en un grupo al que también se habían unido Pinot y Roche. Dani Moreno entraba a más de dos minutos dejando resuelta otra de las dudas que se habían presentado en la carrera sobre la capitanía del conjunto ruso entre él y Purito.
Así con 41 años, Horner, se posiciona como una de los claros aspirantes a hacerse con esta edición de la Vuelta a España y más si cabe cuando es uno de los mayores especialistas ante la siguiente prueba a la que se enfrentarán los ciclistas, la única contrarreloj individual de este año en Tarazona de 38 kilómetros y con la subida al alto de Moncayo durante la misma el próximo miércoles y tras la primera ansiada jornada de descanso pero que sin duda hará saltar las dudas en muchos corredores sobre el estado en el que se encontrarán para afrontar esta dura prueba.