Gracias a su notable actuación en las dos últimas pruebas -ganador en Peñafiel y segundo en Moral de Calatrava- el catalán Pol Hernández (Esteve) se proclamaba el pasado viernes vencedor de la Copa de España junior Cofidis 2016, sucediendo al gallego Alejandro Regueiro, e inscribiendo su nombre en un palmarés que, desde 1999 incluye a nombres como los profesionales Luis León Sánchez, Javier Moreno, José Joaquín Rojas y Lluis Mas, o destacados sub23 como Fernando Barceló y Jaume Sureda.
Sin duda los dos finales en alto fueron la clave de la victoria de este junior de primer año de Les Masies de Voltregá de la Gleva, en Barcelona, que se define como “un corredor bastante explosivo. Los finales como esos, en rampa, son los que mejor me van, aunque suelo ser rápido en otro tipo de llegadas y me defiendo en los puertos largos”. Vamos, un corredor completo que, por lo visto en la presente edición de la Copa de España Cofidis, dará mucho que hablar.
Hernández sumaba 210 puntos, frente a los 191 de Mario Carrasco (Valverde Team) y los 149 de Alejandro Ropero (RH+/Polartec), que le acompañaban en el podio final. Por equipos, tercer triunfo consecutivo para la Fundación Contador, esta vez con el patrocinio de RH+/Polartec, que no tuvo rivales en este apartado, aunque por el comienzo de la Copa parecía que también la iban a conseguir individualmente.
El primer líder sería Alejandro Sánchez (Huesca La Magia) tras quedar tercero tras dos rusos del Lokosphink en el Memorial Joan Bautista Llorens, aunque en las dos siguientes se las llevarían dos hombres del RH+/Polartec. Alejandro Ropero ganaba el Trofeu 15 d’Abril, la única prueba nueva en la presente edición y que sorprendió gratamente por su alto nivel organizativo, cogiendo el maillot amarillo, mientras que en la Cursa del Llobregat, que regresaba al calendario, copaban el podio, con victoria de Claudio Clavijo y liderato de Marc Brustenga.
Parecía que el equipo de la Fundación Contador iba a llevarse de calle la Copa de España Cofidis, al tener a cuatro hombres entre los cinco primeros de la general a mitad de competición, aunque Hernández ya se había metido ahí, como una amenaza callada, cuarto de la clasificación. “Desde ese momento ví que podía luchar por la Copa. No sé si ganar, pero si estar en el podio, por lo que hice una preparación más específica para ello”, añadía.
Pero la segunda mitad de la Copa de España, con las tres pruebas de verano, fue bien distinta para el equipo de Félix García Casas, que echó en falta a Clavijo por lesión, y que Brustenga y Ropero no tendrían la regularidad necesaria, aunque el granadino acabaría tercero.
En San Sebastián de los Reyes, Carrasco se llevaba el triunfo al sprint y Brustenga mantenía por poco el liderato. Pero ya en el Castillo de Peñafiel, la victoria de Hernández le llevaría a vestirse de amarillo, maillot que no perdería en el Trofeo Feria y Fiestas de Moral de Calatrava, una carrera con buena disposición, pero con muchos aspectos a pulir, que se anotaba Eugenio Sánchez (Castillo de Onda), otro junior de primer año.
“La verdad es que estoy muy contento. En San Sebastián de los Reyes no tuve mi mejor día, pero cuando me puse líder en Peñafiel sabía que podía ganar la Copa”.
Ahora Hernández se marca “como próximo objetivo el Campeonato de España de Reinosa, e intentar estar en la selección que vaya al Mundial”, aunque quizá el Europeo, dentro de un mes justo, con ese final en Cadoudal, pueda venirle como anillo al dedo.
Fuente RFEC