La LIII edición del Ormaiztegiko Ziklokrossa confirmó su condición de clásico del norte con una mañana de pradera viva, giros de ida y vuelta y ese punto de tensión que convierte cada apoyo en una decisión. El C2 guipuzcoano juntó generaciones y acentos: bloque francés agresivo, oficio del pelotón estatal y caras conocidas del WorldTour dejándose ver entre cintas. En ese cruce, Clément Horny encontró antes que nadie la tecla del circuito y remató la manga masculina por delante de Gonzalo Inguanzo y Mario Junquera, en una carrera que se ganó por colocación y ritmo sostenido, sin fuegos artificiales pero con un desgaste constante que fue limando las opciones de todos.
La manga open masculina se decidió sobre un circuito ya machacado por las mangas previas: roderas profundas, apoyos justos y barro que obligaba a medir cada cambio de ritmo. En ese terreno, Clément Horny construyó la victoria por desgaste, abriendo hueco sin un latigazo único, a base de mantener una trazada limpia y acelerar en la salida de cada giro. Gonzalo Inguanzo se sostuvo como principal alternativa, siempre en vigilancia, mientras Mario Junquera consolidó el tercer peldaño con una segunda mitad muy seria, aprovechando los errores que iban dejando las roderas. Entre los nombres con más oficio, Aitor Hernández completó la jornada dentro del grupo cabecero durante buena parte del día; también se dejó ver Ion Izagirre, fiel a su cita otoñal con el ciclocrós guipuzcoano
La manga femenina tuvo una dueña clara: Anaïs Morichon mandó de principio a fin con un correr económico, trazada limpia y cero prisas donde no las había. Sara Cueto sostuvo el pulso desde atrás y Léa Stern cerró un podio internacional, con la sensación de que cada metro ganado se trabajaba doble en las zonas de ida y vuelta. Entre las españolas, Ana López, Marta Beti y Nahia de Miguel pelearon posiciones de mérito en una carrera que premiaba la regularidad; Ainara Elbusto completó el día con una actuación de oficio, lejos de su mejor versión pero siempre dentro.
En júnior, victoria para Benjamin Noval, con Raúl López a un suspiro y un ramillete internacional completando el top-5 tras una última vuelta a cara de perro. En júnior femenina, la más fuerte fue Noémie Jurado, por delante de María Gutiérrez y Maddi Saizar, en una manga que se estiró por ritmo desde la segunda vuelta. El semillero cadete habló de futuro: Alejandro Diego Martínez resolvió la carrera masculina con temple y precisión, mientras Laura Solares se impuso entre las chicas tras moverse con solvencia en los apoyos laterales.



