Con inercia positiva tras mostrar una versión muy combativa en Cuéllar el Controlpack afronta un fin de semana de gran actividad con el GP Vila-real y en dos nuevos compromisos con les Grans Clàssiques en El Bruc y Òdena, que a su vez formarán una Challenge. Tres pruebas donde la estructura catalana partirá con el objetivo de pelear por los puestos de honor con la valentía que le caracteriza.
En el renovado GP Vila-real, el Controlpack se enfrentará a un recorrido de 160 kilómetros en un recorrido muy quebrado con múltiples ascensiones a superar. En los primeros 50 kilómetros se prevé una gran batalla por la fuga, con los muros de Fanzara y Ludiente como puntos clave. Una vez superado este tramo llegarán las subidas más importantes de la jornada, el puerto del Castillo de Villamalefa y Zucaina, donde la estructura catalana deberá mantener una buena colocación con el objetivo de formar parte de la posible selección que pueda producirse. El retorno a Villareal será más favorable a pesar de que incluirá varios repechos que pueden acabar de dinamitar la prueba.
En Vila-real el Controlpack formará con Diego Beltrán, Sergi Manrique, Christopher Morales, que regresa a la competición tras disputar los Juegos Panamericanos, Rubén Pitarch, Matvey Tokarev, protagonista en Cuéllar; Andrés San Abdón y Gerard Guillamón, flamante incorporación del equipo.
Este año se suma a les Grans Clàssiques ‘El Timbaler del Bruc‘, una prueba donde la montaña cobrará relevancia con un total de 4 altos puntuables. El recorrido contará con dos bucles, un primero más largo en un terreno con varias subidas propicio para buscar la escapada y un segundo circuito de regreso a El Bruc con un puerto de montaña a 35 kilómetros de meta que puede jugar un papel trascendental en el devenir de la carrera.
En El Bruc, la estructura catalana contará con Marcel Molist, Roger Puig, que acarició el top-10 en la Clásica de la Chuleta, Martí Pratginestós, Jaume Villar, Llibert Sendrós y Óscar Cabanas.
La segunda cita del fin de semana de les Grans Clàssiques arrancará con un bucle en la localidad de Òdena, donde se completarán los primeros 20 kilómetros. Una vez pasado este tramo, la prueba se adentrará en un terreno sinuoso que conducirá al pelotón hasta el exigente alt de Maioles (2ª categoría), donde se esperan movimientos para formar la escapada de la jornada.
Tras dejar atrás Maioles, la carrera continuará teniendo mucha exigencia con un tramo de constante sube y baja donde los corredores del equipo deberán mantener la concentración para tener presencia de los posibles cortes que se puedan formar. El punto álgido llegará en el último tercio de la prueba, donde la ascensión a Rubiò (1ª categoría) acabará de seleccionar la carrera a 10 kilómetros del final. Una vez coronado el puerto, el terreno será favorable hasta llegar de nuevo a Òdena, donde estará ubicada la línea de meta.
Para la última prueba del fin de semana el Equipo Controlpack alineará a Marcel Molist, Roger Puig, Martí Pratginestós, Jaume Villar, Llibert Sendrós, Óscar Cabanas, Diego Beltrán, Sergi Manrique, Christopher Morales y Matvey Tokarev.
Prensa Controlpack