El escenario era inmejorable y el equipo Caja Rural-Seguros RGA respondió a las mil maravillas con un inspirado Samuel Fernández. El asturiano se filtró en la escapada del día en la primera etapa de la París-Niza y se vació para ponérselo difícil al pelotón, lo que le valió el premio al más combativo de la jornada.
Las diferencias nunca llegaron a ser excesivamente grandes, entre los dos y tres minutos, pero los buenos relevos en cabeza permitieron a los aventureros sumar puntos de la montaña y pelear por la combatividad. A falta de unos 60 kilómetros para la meta, el asturiano rompió el grupo con un ataque que lanzó por delante cuando el pelotón ya avivaba el ritmo para neutralizar la fuga.
Con el grupo ya unido de nuevo, el sprint final asomaba en el horizonte y todo el bloque de Caja Rural-Seguros RGA se volcó para llevar protegidos a Iúri Leitāo y a Thomas Silva. Finalmente, el uruguayo fue el mejor en meta firmando un top-20 (18°).
Samuel Fernández: “Lo primero le quiero dedicar este podium a mis abuelas, a mi familia y a mis amigos. No me esperaba un podium, sí que tenía intención de coger alguna fuga, lo buscábamos ya que solo estar aquí es un sueño, y la verdad que la recompensa llegó muy rápido y fue muy buena. Esto sólo es el comienzo y tengo muchas ganas de seguir luchando. Voy a seguir intentándolo estos días y me encuentro estoy bastante bien, así que seguiré intentando ser combativo y dejarme ver».