El neerlandés Mathieu van der Poel hizo historia en el Mundial de ciclocrós de Liévin al conquistar su séptimo título en la categoría élite, igualando el récord de Erik De Vlaeminck. Con un dominio absoluto desde la primera vuelta, el ciclista neerlandés dejó sin opciones a sus rivales en una jornada para el recuerdo.
Wout van Aert, su gran adversario, sufrió una caída en la primera vuelta mientras intentaba remontar posiciones tras salir desde la cuarta fila, lo que le hizo perder 46 segundos y lo relegó a la segunda posición. A pesar del esfuerzo por recortar la diferencia, el belga no pudo evitar la victoria de Van der Poel. El podio lo completó su compatriota Thibau Nys, quien se impuso en la lucha por el tercer puesto frente al neerlandés Joris Nieuwenhuis.
Van der Poel supo gestionar la carrera a la perfección, escapándose desde la primera vuelta y ampliando su ventaja de forma progresiva. Con el aliento de los 35.000 espectadores presentes en Liévin, cruzó la meta celebrando con un gesto de siete dedos, en referencia a sus títulos mundiales.
El neerlandés iguala así el récord de siete títulos en la categoría élite masculina que ostentaba Erik De Vlaeminck y tendrá la oportunidad de superarlo el próximo año en Hulst, en su país natal. En la historia del ciclocross, solo Marianne Vos ha conseguido más títulos mundiales en la élite, con ocho victorias en la categoría femenina.
«Esto significa mucho, es historia. Cuando comienzas en la élite sueñas con ganar un título mundial, pero nunca imaginas llegar a siete. Es algo muy especial», declaró Van der Poel tras la carrera. También destacó la importancia de salir al frente desde el inicio en un circuito complicado y con dificultades para engancharse a los pedales.
A pesar de un pequeño susto con un pinchazo al comienzo de la prueba, Van der Poel logró manejar la situación y mantenerse en cabeza sin mayores problemas. «Sabía los lugares donde tenía que estar adelante para marcar mi propio ritmo. Desde el momento en que logré abrir hueco, me dediqué a gestionar la ventaja y evitar errores», explicó el campeón.

Felipe Orts finalizó en una meritoria 12ª posición, consolidando su gran temporada y confirmando su crecimiento en la élite del ciclocrós. El alicantino ha completado un año excepcional, logrando hitos históricos para el ciclocrós español, como su subcampeonato de Europa y los primeros podios para España en la Copa del Mundo, con un segundo puesto en Dublín y un tercero en Hulst. Además, se ha proclamado campeón de España por séptima vez, convirtiéndose en el ciclista con más títulos nacionales en esta disciplina.
Por su parte, Mario Junquera y Kevin Suárez también tuvieron una destacada actuación, terminando en las posiciones 30ª y 35ª, respectivamente. La representación española continúa ganando protagonismo en el panorama internacional, con una progresión ascendente que augura un futuro prometedor para el ciclocross nacional.