El equipo sub-23 llega a una de las carreras más importantes de la temporada. Junto al Giro Next Gen y la Ronde d’ l’Isard, el Giro Ciclistico Valle D’Aosta, nombre oficial de la carrera, será una de las pruebas de mayor nivel en las que participará la escuadra. 5 corredores viajarán a la región de Aosta, al noroeste de Italia y limitando con Francia y Suiza, a una carrera que ascenderá puertos de montaña míticos.
Riccardo Archetti, ciclista de primer año en la categoría y después de mostrarse sólido en las carreras del último mes, tendrá la oportunidad de competir frente a los mejores ciclistas de la categoría. Junto a Archetti, Luca Bagnara uno de los escaladores más destacados del equipo repetirá experiencia en la carrera italiana. Otro de los que repetirá será Antonio González. El soriano formará parte de un potente quinteto que compitió en la Vuelta Ávila recientemente. Martín Barrero será otro de los ciclistas que compondrá el quinteto en busca de mejores sensaciones después de sufrir una ligera enfermedad. Álex García será el último de los ciclistas que formarán la plantilla del equipo. El catalán ha obtenido en junio y julio sus mejores resultados de la temporada siendo octavo en la última etapa del Circuito Montañés y ser séptimo en la Vuelta Ávila.
Serán cinco etapas de miércoles a domingo las que tendrán que superar los ciclistas. Cinco ‘test’ de resistencia sobre un terreno para nada sencillo. La primera jornada serán tan solo 40 kilómetros de etapa a los pies del Mont Blanc. La etapa terminará por encima de los 1300 metros después de un ascenso de 11 kilómetros con una inclinación media del 5,5%. La segunda etapa con un perfil de media montaña llevará a los corredores desde Verrès hasta Borgofranco después de 127 kilómetros y dos ascensos puntuables. Será la previa de una tercera etapa mucho más exigente para los ciclistas. En la tercera etapa llegará la alta montaña (pese al final en alto del primer día) con dos puertos de gran entidad en la parte final. Verrogne (13,4km-7,3%) y Cole San Carlo (11,3km-9,2%).
La cuarta jornada volverá a tener presencia de grandes puertos. Serán 163 kilómetros, la etapa más larga de la edición y un total de cinco cimas puntuables. El encadenado de Col d’Arlaz (7,4km-8,7%), Col Tsecore (9,8km-7,9%) y Col de Joux (6,7km-6,9%) dejará la carrera prácticamente sentenciada. La quinta y última etapa con salida en descenso, menos de 100 kilómetros y dos ascensos más que conocidos, será el colofón a una semana muy exigente. Col St Pantaleón (16,3km-7,3%) y el ascenso final a Cervinia (15,4km-6%).
«Yo la defino como la carrera más dura del mundo. Es una carrera durísima con cinco días muy intensos. Traemos un equipo de escaladores que esperemos vayan evolucionando durante la carrera y con los que no tengamos ningún percance y que la suerte acompañe. Antonio y Martín son los más veteranos y los que tendrían que estar en la punta. Álex ha hecho una muy buena Vuelta Ávila y Luca y Riccardo, que también llegan en buen momento. Me gustaría estar en el top10 de la carrera, pero tenemos los pies en el suelo. Es un resultado difícil, pero no imposible», explica Rafael Díaz Justo antes de comenzar una de las carreras más exigentes en la categoría sub-23.
