Objetivos. Toda persona en esta vida tiene unos objetivos. Algunos, más asequibles; otros, más complicados. Y, en el peor de los casos, algunos que se enquistan a lo largo del tiempo. Por ello, estos últimos son los que más se disfrutan cuando se consiguen, como demostró este fin de semana Torres – Trigon. Tras muchos años de esfuerzo y altibajos, Diego Gonzalo se llevó el Campeonato de La Rioja para dar al equipo aragonés su segundo título regional del curso.
El Memorial Arturo Grávalos comenzó con la formación de una peligrosa fuga en la que entraron dos rivales directos por el título regional, razón suficiente para que todos los integrantes de Torres – Trigon trabajaran al unísono, consiguiendo echar abajo este movimiento. A partir de ahí, el férreo control del pelotón hizo imposible cualquier intento de sorpresa, por lo que todo quedó dispuesto para el caótico sprint de Logroño, donde la 24ª plaza sirvió a Diego Gonzalo para llevarse el Campeonato de La Rioja en categoría élite.
En cuanto a la visita a la Ronda al Maestrat, fue una fuga la que se disputó el triunfo tras una jornada que poco a poco fue seleccionando el pelotón al paso por los diferentes muros del bucle por la comarca, donde también se incluían zonas técnicas y estrechas. Siendo parte de un grupo de alrededor de 40 ciclistas que entró por detrás del quinteto cabecero, Pau Matarin sorprendió con un ataque en el kilómetro final para ocupar la 7ª plaza, que también permitió al equipo conseguir la 4ª posición por escuadras.