El Controlpack acaricia el pódium en el GP Òdena, donde Ilya Savekin ha protagonizado una gran remontada para concluir en cuarta posición. Además, el equipo ha tenido presencia en la fuga de la mano de Arnau Solé, que formó parte de la selección definitiva
Esta mañana regresaban les Grans Clàssiques con el exigente GP Òdena, donde el Controlpack afrontaba la salida con el objetivo de revalidar el pódium conseguido en la pasada edición. Ya desde los primeros compases de la carrera, el equipo buscaba de manera insistente una fuga que acabaría de formarse en el alto de Maioles donde conseguía infiltrarse Arnau Solé.
El buen entendimiento entre los siete escapados finalizaba al paso por Montmaneu, cuando se producía un movimiento en la avanzadilla que Solé conseguía responder de manera inmediata para formar un nuevo grupo cabecero con 4 integrantes. Desafortunadamente, Arnau acusaba unos problemas físicos que le hacían perder contacto en las primeras rampas de Rubió.
El equipo, lejos de arrojar la toalla, tiraba de pundonor de la mano de Ilya Savekin, que firmaba una etapa de menos a más en un terreno que no se adapta completamente a sus características. El joven ciclista ruso iba neutralizando corredores de la escapada para llegar a línea de meta en cuarta posición a escasos 7 segundos del tercer clasificado. Por detrás, Jaume Espuis completaba el doble top-10 de la escuadra catalana finalizando la prueba en séptima posición.
El Controlpack se marcha de Òdena satisfecho con la actuación global de los corredores, que se han vaciado buscando los puestos punteros. El equipo trabaja ya pensando en el siguiente objetivo, una nueva cita de la Copa de España, la Santikutz Klasika, que se celebrará el próximo miércoles.