Uno de los clásicos del verano partirá este miércoles desde Viseu abriendo así once jornadas en las que el ciclismo inundará Portugal, tanto de una forma física como por la abundante atención mediática que cada año genera en el país vecino la disputa de la Grandísima. Una 84ª edición de la Volta a Portugal en la que Caja Rural-Seguros RGA volverá a pelear por los triunfos parciales con un bloque joven que sigue la línea de pasadas temporadas.
Atracón de montaña y dos cronos
Un recorrido tremendamente exigente que pondrá la victoria sólo al alcance de los más fuertes, dividido en un prólogo y diez etapas a las que habrá que añadir el habitual sofocante calor de mitad de agosto. La Volta comenzará en Viseu sobre 3,6 km contra el crono y concluirá en Viana do Castelo con otro ejercicio individual, en este caso de 16,3 km. Por medio, un guion de dureza creciente con tres primeras jornadas en línea en principio destinadas a velocistas pero con alguna trampa cerca del final que podría desbaratar la llegada masiva.
La cuarta etapa, con final ascendente en Castelo Branco, supondrá sólo el aperitivo a lo que llegará a partir del lunes. La de sobra conocida llegada a la larguísima subida de Torre abrirá un bloque de montaña que continuará con una apasionante etapa por la Serra da Estrela y final en Guarda, otro desenlace en alto en Montalegre, el ligero descanso en Fafe; donde se espera que triunfe una fuga, y el colofón el último sábado en Senhora da Graça después de superar otros dos primeras por el camino.
Caja Rural-Seguros RGA contará para esta cita con un siete del que repiten respecto a la pasada edición el entonces stagiaire Joseba López, Yesid Pira y Calum Johnston, quien peleó por el triunfo en Braga concluyendo cuarto. Además, Portugal supondrá el debut con su nuevo jersey para el guipuzcoano Gorka Sorarrain y la primera carrera con el primer equipo para Jaume Guardeño. Los checos Tomas Barta y Daniel Babor, llamados a ser protagonistas en los primeros días, completan el grupo.