Gerard Cano concluyó segundo este domingo en una apasionante edición del Memorial Chely Álvarez de Bembibre en la que el triunfo se marchó al zurrón de Markel Beloki (MMR Academy). Cano y Beloki se movieron en la última subida, San Pedro Castañero, de un grupo de siete unidades que se agrupó tras el paso por la ascensión a Onamio.
Fue Onamio clave en la selección. De allí salió muy rota una carrera que durante muchos kilómetros tuvo en su vanguardia un quinteto de escapados en el que estaba presente Dani Díaz. En Onamio se destacaron Markel Beloki (MMR), Dani Tenorio (GSSport), Tomás Pombo (Cortizo) y por parte del EOLO-KOMETA tanto Gerard Cano como Balint Feldhoffer. Después llegarían desde atrás el brasileño Andrey André y Sergio Romeo (MMR) para conformar el septeto que encaró San Pedro Castañero.
Gerard Cano: “Ha sido un día súper duro donde el equipo ha empezado a tirar desde el kilómetro cero. En el puerto de doce kilómetros se ha roto roto casi todo y después Dani ha atacado para irse con una fuga. En el tramo llano hubo una caída que me sacó de la carretera, pero por suerte no llegué a caer y pude llegar entero al puerto más duro. Allí nos hemos ido varios corredores. Atacó Tenorio en primer lugar, después remató Beloki y a ese movimiento he reaccionado para irme con él. Hemos ido juntos hasta el final, pero a 500 metros me ha demarrado y se me marchó. He tenido buenas sensaciones subiendo y en general me he encontrado bastante bien, pero sobre todo ha sido cosa del enorme trabajo del equipo, que ha sido impresionante”.
En el Trofeo Julián Borràs de Càleig, prueba debutante en el menú del Trofeo Víctor Cabedo y cita final de esta edición, se volvió a concretar el éxito de la fuga en un vibrante circuito semiurbano que deparó multitud de movimientos. La victoria fue para Diego Aparicio (Valverde Team – Ricardo Fuentes), con Pablo Leno y Manuel Sanroma por parte del EOLO-KOMETA Cycling Team integrando el pelotón principal que llegó a 23 segundos del ganador.
En la última curva, en un pelotón de unas cincuenta unidades que rodaba lanzadísimo, se produjo una caída que afectó a varios corredores y que trastocó los preparativos de Leno y Sanroma para encarar ese sprint.
“Fue una prueba un poco loca, sobre todo porque había varios aspirantes a la general final del Cabedo y nosotros hemos ido un poco a la contra. Pericas, uno de los candidatos, se metió en una fuga muy peligrosa que echó abajo el equipo del líder y en otro movimiento posterior no tuvimos presencia. Balazs se movió desde el grupo y llegó a esa fuga, que al final fue cazada en la última vuelta. En el giro final se han ido los dos corredores que se llevaron la victoria”, explica el director Isaac Cantón.
