El Memorial Valenciaga es la llamada “carrera profesional”. Presenta un gran kilometraje, es la que más desnivel acumulada de forma constante y presenta una excepcional dureza en la parte final para decidir al ganador. Además, es la carrera para un escalador-fondista bastante completo, ya que tiene muchos puertos y estos son bastante constantes.
De hecho, pocas veces se ven alternativas reales de victoria antes de la gran subida a Ixua (4,3km al 9,5%), donde la relación W/Kg es la clave para ser ganador. Resta aún la ascensión a San Miguel y luego hay que llegar a Eibar con unos kilómetros que se pueden hacer muy duros.
Todos los años, un grupo de elegidos coronan Ixua con opciones de disputar. Aquí presentamos un estudio de caso de Eusebio Pascual en la edición 2019 del Memorial Valenciaga. El ciclista alicantino permaneció escondido hasta Ixua para mostrar entonces su
potencial, y los datos necesarios para estar en ese grupo de escaladores reducido. Además, con estos datos, sin duda alguna, tienen un buena carta de presentación para ser un buen escalador en profesionales o un hombre con mucho fondo con capacidad de superar bien la montaña.
Antes de desgranar un poco la carrera, vamos a realizar una aclaración de conceptos básicos e importantes para entender la dureza de las carreras.
- NP: Potencia normalizada. De forma fácil, la potencia media sin contar los 0
- Potencia avg: Potencia media.
- VI: El cociente entre NP y P avg. Habitualmente, lo usamos para entender como ha sido de intensa la prueba. Si el VI es cercano a 1, quiere decir que se ha ido todo el día apretando y sin dejar de pedalear. Si por el contrario es cercano a 1’45, es que se ha ido muchos tramos sin prácticamente dar pedales.
Debemos hacer notar que el análisis esta vez se realizara mediante la plataforma de WKO, debido a que hubo 4 picos de potencia que se han tenido que eliminar.
Resumen rápido
- PN 304 W (4,68 W/kg) en 4h y 20 minutos.
- Con 65 kg los 6 puertos con una PN de:
- Itziar: 10’ a 5,29 W/kg al 4,5%
- Meagas 7’ a 5,3 W/kg al 3,3%
- Azkárate 6’ a 6,21W/kg al 6,5%
- Elgeta 14’ a 5,85 W/kg al al 8,3 %
- Ixua 14’ a 6,09 W/kg al 9,5%
- San Miguel 11’ a 5,86 al 4,5 %
Paso a paso
Toda la carrera
A pesar de que los datos parecen indicar que es una carrera constante, realmente es una
carrera de contrastes entre subidas y valles, donde se sube muy rápido (alto W/kg) a un VI de 1 y luego se mata un poco la carrera por los valles.
Al igual que en una carrera profesional, de salida es un buen terreno para que se forme una escapada. Los primeros 75km de recorrido presentan solo 710m de desnivel positivo y carreteras de doble carril. Un terreno en el que una escapada se puede entender bien y sacar tiempo. De hecho, es habitual ver cómo en el Memorial Valenciaga las fugas pueden llegar a tener 5 o incluso 6 minutos de ventaja, algo poco habitual en otras carreras de la categoría.
A pesar de eso, en la edición 2019 no termino nunca de existir esa escapada, y hubo diferentes alternativas como plasma la crónica de la prueba. El pelotón rodó bastante tranquilo, prueba de ello la tenemos en los vatios medios y normalizados (217W y 272W), unos datos asequibles para la categoría.
El ritmo de subida en estos puertos más cortos también fue tranquilo, subiendo entre 5,2 y 5,3 W/Kg entre 5 y 9 minutos.
La carrera entra en su segunda hora y la tensión va incrementando. Se afronta la subida a Azkárate, de 6 minutos a 6,2W/kg. Aquí se nota bastante el aumento de ritmo, y a esta intensidad empezará ya el goteo de corredores cortados. En este tramo, la dureza es considerable con 800m de ascenso en 30km, y dos puertos ya más duros (Azkárate + valle + Elgeta).
De hecho, se observa como el grupo de cabeza levanta el pie de Elgoibar a Elgeta 270 W de normalizada, con un VI bastante reducido debido a la pendiente, pero en general, tranquilos. Esto permite que el pelotón se agrupe y empiece un grupo de 80-90 corredores la ascensión a Elgeta.
Habitualmente, llegar a la cima de esta ascensión con poco tiempo perdido permite terminar la carrera. Elgeta suele ser el primer punto de inflexión del Memorial Valenciaga (14 minutos a 5,85 W/kg). La carrera sufre la primera batalla antes de su desenlace, así la parte central de este puerto se subió a 6,1 W/kg durante 9 minutos para completar con un final más tranquilo: los últimos 4 minutos a 5,5W/kg.
Los que aspiran a ganar saben que es pronto para lanzar su ataque, y suele utilizarse este puerto para probar a los rivales o para generar un desgaste elevado. O simplemente para seleccionar el grupo. En este caso, en 2019, poca gente puede subir a más de 6W/kg durante 10 minutos y el pelotón suele coronar en pequeños grupos que luego se reagruparan en la transición de Elgeta a Ixua (PN de 250W y un VI de 1’3 en terreno favorable).
En esta parte de carrera se suele recortar considerablemente las ventajas de las escapadas. De hecho, en esta edición la avanzadilla que se formo (ya casi en Azkárate) apenas pudo coronar Elgeta con pocos segundos.
Ixua y San Miguel. La clave
Con 3:30h de carrera, 140 kilómetros de recorrido, 1700 metros de desnivel acumulado y con 230W de potencia media y 288W de potencia normalizada, junto a una VI de 1’26; llega el momento de decisivo.
La carrera se juega en Ixua y San Miguel, con 19km y 660m de desnivel. El puerto limitante (el que decide quien puede ser el ganador) es Ixua. El determinante, el juego que hay entre San Miguel y meta de ataques y contraataques. Apenas un puñado de ciclistas es capaz de mantenerse en posiciones delanteras.
Con una media bastante constante, Ixua se subió a 390W para Eusebio Pascual con 65kg, lo que significa 6,09 W/kg durante 14 minutos. Pascual nos comenta que entró «un poco retrasado y me tocó remontar un poco». Lo cierto es que son muy buenos datos para ascender esos 4km y estar en la pomada de los escaladores a nivel nacional.
Luego San Miguel se subió bastante constante, pero a un ritmo más bajo debido a la vigilancia que hubo entre ellos.
Conclusión
El Memorial Valenciaga es una carrera con la dureza concentrada al final, pese a que acumula un gran desgaste (siempre en subida) y exige un esfuerzo muy aeróbico. Requiere de un W/Kg a la intensidad popularmente conocida como «umbral anaeróbico», acompañado de una potencia aeróbica máxima óptima.
Es decir, tienes que ser capaz de tener un ritmo de subir los puertos constantes a un
ritmo muy alto, pesando preferiblemente menos de 70-72kg.
Curiosidades
Os dejo los dos histográmas con las imágenes comparativas entre el ganador de Aitzondo y
uno de los posibles ganadores de este Valenciaga.
Como veis, en Valenciaga la campana que haría la curva es mucho más acentuada utilizando más la parte aeróbica de ritmo alto sostenido, mientras que en Aitzondo esta campana en más suavizada y repartida debido a una mayor demanda de potencia relativa por arriba de esta parte aeróbica y mayores arrancadas y frenadas.
Dos carreras de características bastantes diferentes. Es de valorar y destacar la calidad del protagonista de hoy, puesto que fue capaz de ganar las dos, demostrando ser un corredor completísimo y con los datos de potencia de la categoría más que suficientes para dar
el siguiente paso.
Alexis Gandía Soriano (1993) es el preparador físico del equipo profesional Burgos BH. Ha estudiado Fisiología del Deporte en la Universidad de Valencia y ostenta el título de Director Deportivo UCI. Fue ciclista amateur en equipos como el Seguros Bilbao.