Cada año, y en aumento desde la existencia de las redes sociales, se abre un interesante debate entre seguidores del ciclismo sobre cuando empieza la temporada. Algunos lo sitúan en la Omloop, punto de partida de las clásicas de primavera, otros, más despistados, no se enganchan hasta el Giro de Italia y también hay quién trata de cerrar el debate reivindicando que cuando no hay ciclismo en carretera hay ciclocrós y aquí hay que estar al pie del cañón todo el año.
Un hecho objetivo es que la temporada World Tour de ciclismo en carretera masculino dará comienzo el 21 de enero con el Tour Down Under. Seguidamente haremos un breve repaso de los equipos pertenecientes a dicha categoría y lo que se espera de ellos durante las Grandes Vueltas de la temporada 2020.
Duelo en la cumbre, INEOS vs Jumbo
La excelente maniobra publicitaria del Jumbo-Visma de anunciar su equipo para el Tour de Francia 2020 en diciembre de 2019 ha exaltado a la afición ciclista. Estamos acostumbrados a conocer la alineación de los equipos a pocos días del comienzo de la ronda francesa pero este año el equipo holandés ha decidido avisar al INEOS des de antes de comenzar la temporada. Las expectativas con el Jumbo ya eran altas después del fichaje de Tom Dumoulin pero la auténtica armada que envían al Tour y que han publicitado des de diciembre son una auténtica amenaza para el dominio del equipo inglés en el mes de julio.
Our 2020 @LeTour team will be @rogla @tom_dumoulin @s_kruijswijk @tonymartin85 @seppkuss @LaurensDePlus @RGUpdate and @WoutvanAert
— Team Jumbo-Visma cycling (@JumboVismaRoad) December 20, 2019
Roglic, vencedor de la Vuelta y podio en el Giro, Kruijswijk, podio en el Tour, y un Dumoulin que con el cambio de aires espera recuperar su mejor versión conformaran una tricefália. excelentemente acompañada. Sepp Kuss y Laurens De Plus, pese a su juventud, ya han exhibido el excelente talento que hay en sus piernas. El primero con una exhibición en el Santuario del Acebo en la pasada Vuelta y el segundo ganando la general del Binck Bank Tour contra clasicómanos en su propio terreno. La juventud de los dos escaladores estará acompañada por la veteranía del también escalador Robert Gesink.
Para el resto de los terrenos, y en la montaña también si es necesario, el Jumbo contará con dos superclase como Tony Martin y Wout van Aert. Ambos trataran de acompañar a los líderes en las etapas trampa y su trabajo será clave en la media montaña. La apuesta del equipo es tan fuerte que uno de los mejores esprinters del mundo, Dylan Groenewengen, será relegado al Giro y la Vuelta.
La amenaza holandesa ha tomado por sorpresa al INEOS. El equipo inglés tenía pensado hacer un año de ‘aquí paz y después gloria’ pero la declaración de guerra de Holanda a Inglaterra para julio ha obligado a un cambio de planes. La previa de la temporada empezó con Egan Bernal diciendo que el Giro es una carrera muy bonita, que le gustaría correrla y que para nada le importaría ir luego al Tour de gregario de Froome.
El patrocinador prefiere que el Tour lo gane un británico, lógico, y además entrar en la historia del Tour de Francia a la altura de Merckx, Hinault, Anquetil e Indurain es muy tentador; pero Chris Froome aún no ha vuelto a competir des de su descalabro en junio del año pasado y el INEOS ha dado marcha atrás. Copiaran la fórmula del Jumbo, patentada por Movistar, y también mandarán una tricefália. Esta de muchas más garantías que la holandesa pues los tres ya saben lo que es vencer el Tour de Francia: Chris Froome, Egan Bernal y Geraint Thomas.
El otro gran objetivo de los británicos esta temporada será el Giro de Italia. En esta ocasión le darán protagonismo, sin positivo mediante, a cargo de Richard Carapaz, vigente campeón de la prueba.
Movistar y su difícil renacer
Al contrario del equipazo que envían al Tour sus rivales Movistar tiene un julio complicado. Enric Mas, del que se espera mucho, debería mejorar en exceso respecto al año pasado para aspirar a algo grande en el Tour. Marc Soler será la otra gran baza del equipo español y aunque nunca ha tomado las riendas en una vuelta de tres semanas parece difícil que vaya a estar cerca del podio.
El resto de la temporada dependerá suponemos del protagonismo que logre Alejandro Valverde. Sumará victorias pero probablemente no sea en las carreras de más prestigio. Sus principales objetivos serán los Juegos Olímpicos, que condicionará mucho su participación en el Tour, y el Mundial. Acudirá de nuevo a la Vuelta dónde le acompañará Marc Soler. Ahí el catalán si que tiene opciones más serias de aspirar a algo grande. Al Giro de Italia no parece que Movistar vaya a enviar a ninguno de sus líderes.
La religión ‘landista’
Otro equipo que centrará esfuerzos en el Tour de Francia es el Bahrain. La dupla que liderará al equipo es cuanto menos curiosa. Wout Poels se ha liberado de la maquinaria del Sky/Ineos y buscará su lucimiento personal al lado del incalificable Mikel Landa. El corredor vasco ya ha empezado fuerte la pretemporada volviendo a profesar el ‘landismo’ con declaraciones como «ahora mando yo» o «el landismo seguirá vivo».
El ‘landismo’, dícese de aquel movimiento que surgió ante la innegable belleza que supone ver a Mikel Landa subir un puerto pero que con el paso del tiempo fue tomado por una serie de radicales, algunos de ellos personalidades públicas como Javier Ares, que lo han llegado a proclamar el mejor escalador del mundo o un candidato a dominar grandes vueltas.
Da igual cuando veais esto, ¡#Landismo vive, la lucha sigue! Voglio vederti danzare in bicicletta @MikelLandaMeana #Landani #Landismo #Giro
📽 @eitbkirolak
🎵 F. Battiato pic.twitter.com/3nsUMoUdCG— iker gallastegi (@ikguallas) July 21, 2019
Al vasco, que le va el mambo, se ha dedicado a hinchar una burbuja con la que se lo pasa muy bien. Este año el Tour carece de alta montaña tras jornadas de doscientos kilómetros dónde la selección natural entre escaladores surge sola. Pero Mikel Landa tratará de buscar aspirar a algo grande en el Tour lejos de las garras del Sky y divorciado de una tricefália que no sentó bien a ninguno de los tres. Wout Poels por ahora no ha disputado ninguna general con credenciales como para compartir liderato des de la salida pero faltará ver que dicta la carretera.
Los franceses en polos opuestos
Este año los dos principales equipos franceses se encuentran en una situación muy distinta. El año pasado Pinot estuvo mejor que nunca en el Tour y Bardet peor que nunca. Eso hace que Groupama-FDJ vuelque todos sus esfuerzos en el Tour tratando de alcanzar la general con Thibaut Pinot. El AG2R hará todo lo contrario que sus homólogos. Un Bardet totalmente desconocido en la ronda francesa del año pasado emprenderá el mismo camino que tomó Pinot hará unos años. Abandonar la presión que supone el Tour para los franceses e ir al Giro para tratar de ganarlo.
Los ‘outsider’ del Tour de Francia
Quién estará presente otra vez en la salida de la ronda francesa será Julian Alaphillippe (Deceuninck). Parece difícil emular lo logrado la temporada pasada pues no le dejaran llegar a la montaña con dos minutos de ventaja tomados en etapas trampa pero es Alaphillipe y nunca uno se puede atrever a descartar nada.
La dirección del equipo Astana ha tomado la decisión de que Miguel Ángel López debute en el Tour de Francia. El corredor colombiano lleva años estancado y no parece que vaya a dar grandes resultados en la ronda gala. El año pasado solo fue capaz de hacer ‘top-ten’ en el Giro y la Vuelta. Las esperanzas del equipo kazajo deberían pasar porque el nivel demostrado por Fuglsang la temporada anterior continúe. El danés correrá el Giro de Italia y es un candidato a ganarlo si acaba de demostrar la solidez que siempre le ha faltado en la alta montaña. En la Vuelta el líder será el propio ‘Superman’ López.
Una gran incógnita será el rendimiento en julio de Tadej Pogacar (UAE). Con tan solo 20 años quedó tercero en la Vuelta y venció dos etapas. Es tarea difícil situar dónde se encuentra el techo de este chaval para la temporada que está a punto de empezar pero parece difícil que pueda optar al título de vencedor del Tour. Las esperanzas del UAE estarán también en las otras dos grandes vueltas. En el Giro buscarán hacer un buen papel con los locales Fabio Aru y Davide Formolo y en la Vuelta algo parecido con el propio Formolo y el recién fichado David De la Cruz.
Si el rendimiento de Pogacar es una incógnita también lo es hasta que punto puede progresar Emmanuel Buchmann (Bora). El corredor alemán acabo cuarto en el Tour del año pasado a base de aguantar, esta temporada, con la experiencia de la anterior, veremos si puede estar en la lucha de un podio más caro que nunca. Para el Giro y la Vuelta el encargado de liderar al Bora será el polaco Rafal Majka. Nunca ha demostrado que se le deba tener en cuenta para vencer una gran vuelta pero estará de bien seguro en los puestos de honor esperando que le llegue su oportunidad.
Finalmente hay mucha expectación por como le sentará a Nairo Quintana (Arkea) el cambio de aires. El Arkea es un equipo de segunda fila, Nairo hace años que no rinde a su mejor nivel y por ahora la sensación es que no aspira ni al podio en París. En esta aventura le acompañará un Barguil que en Arkea no ha logrado llegar ni a la sombra del escalador que logró ser en el Sunweb.
La esperanza italiana
Un equipo Trek Segafredo que hace tiempo que no desempeña un buen papel en la general de una gran vuelta este año tiene todas las esperanzas puestas en el Giro de Italia. Ahí estarán de salida su fichaje estrella, Vincenzo Nibali, y una de las sensaciones de la temporada pasada, Giulio Ciccone. Los dos compartirán liderato y buscarán un triunfo que levantaría la pasión de todo un país. A la Vuelta España también irán juntos acompañados de Mollema. Dónde se espera poco del Trek es en el Tour dónde estará comandado por un Richie Porte que está a años luz de su mejor versión.