140 kilómetros en fuga para conseguir la victoria de etapa y el liderato de la XXX Vuelta a León. Eso es lo que ha necesitado hacer el catalán Gerard Armillas (Controlpack) en la preciosa tercera jornada que ha llevado a los ciclistas desde Cármenes hasta Boca de Huérgano pasando por los siempre majestuosos Picos de Europa.
El comienzo del día, marcado por un terreno muy favorable en el que había encadenadas varias Metas Volantes, hizo que la carrera saliera lanzada desde el primer metro hasta que sobre el kilómetro 15 lograban abrir brecha dos ciclistas del UCI Team, Sergey Shatovkin y Petr Kelemen, el argentino del Rías Baixas Julián Barrientos, y el propio Gerard Armillas.
Los cuatro rápidamente hacían camino sin escatimar esfuerzos, que sumado a la calma reinante en ese momento en el pelotón, hizo que la diferencia se fuese hasta más allá de los cuatro minutos cuando se llegaba a pie del primer puerto de esta edición, Las Señales. Antes, varias Metas Volantes en Robles de Valcueva, La Vecilla, La Mata de la Riba, y Puebla de Lillo, por donde pasaba en cabeza en todas ellas Barrientos que ya hoy partía con el maillot rojo que le distinguía como líder de esta clasificación.
En la ascensión a Señales del grupo de cabeza perdía contacto Kelemen, habiéndose vaciado en el terreno anterior en favor de su compañero Shatovkin. Por detrás en el pelotón hubo varios intentos de romper la paz, sin que ninguno llegara a fructificar como el protagonizado por Iván Cobo (Gomur-Cantabria Infinita) y Alessandro Fancellu (Kometa).
#LaVueltaLeon2019 Sufría en las rampas más duras de la subida a Señales Kelemen (UCI) mientras que a @juli_ba_ (@CCRiasBaixas ) Shatovkin (UCI) y Armillas (@CpackBadia ) se les veía muy bien. pic.twitter.com/ztuPTf9vkq
— El Pelotón (@ElPeloton) 24 de julio de 2019
El pupilo del conjunto de Alberto Contador advertía de lo que estaba por venir dentro de su equipo, y es que en el segundo alto del día, Panderrueda, entrada a Picos de Europa, se iban del pelotón varios ciclistas destacándose dos de sus compañeros, Carlos García y Sergio García, que junto con Roger Adriá (Lizarte) conseguían inquietar a los ya dos únicos ciclistas, Armillas y Shatovkin, que seguían comandando la carrera por la cima de esta segunda ascensión, y es que en sus rampas Barrientos no podía seguir el ritmo de la escapada.
Así se llegaba tras un vertiginoso descenso al corazón del Parque Nacional, es decir, a Posada de Valdeón, de donde arrancaba la última subida del día, el duro puerto de Pandetrave, con Armillas y Shatovkin teniendo 3 minutos de renta sobre el trío perseguidor y más de 4 minutos con el pelotón, en el que ya se empezaba a desenvainar las espadas para la batalla que se esperaba en las rampas más duras del puerto.
Catalán y kazajo sufrían en cabeza, Carlos García se iba solo para arriba en busca de la dupla de delante, y del pelotón saltaban con mucha fuerza Samuel Blanco (Rías Baixas), Edu Pérez Landaluce (Kometa) y Miguel Ángel Ballesteros (Valverde-Terra Fecundis), reduciéndose poco a poco las diferencias entre todos ellos con el paso de los 10 kilómetros de ascensión.
García enganchaba justo en la cima de Pandetrave, a 20 de meta, con Armillas y Shatovkin, por donde Blanco pasaba con casi un minuto perdido y con el pelotón cediendo 2 minutos con los tres de punta. En el descenso y terreno favorable posterior se ponían Lizarte y Diputación de Léon-ULB a tirar del grupo principal, pero el caballo ya se les había ido. Y es que la cabalgada la iba a protagonizar un catalán, Gerard Armillas al que los kilómetros, o el hecho de que se uniera un ciclista más al final ya que Samuel Blanco se incorporaba a la cabeza a tan solo 2 kilómetros de meta, no le impedían ser el más fuerte del sprint del grupito consiguiendo redondear una preciosa gesta que además le llevaron directo al liderato de la prueba leonesa.
#LaVueltaLeon2019 Video de la llegada en Boca de Huérgano con triunfo de Gerard Armillas (@CpackBadia ) pic.twitter.com/A1WGtZdSLm
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Segundo era el otro fugado desde el inicio del día, Sergey Shatovkin, y tercero Samuel Blanco, con Carlos García a su rueda. Finalmente el grupo donde viajaban el resto de gallos de la carrera se dejaba 33″ en meta, tiempo no muy significativo con lo que queda por delante.
Para empezar mañana el coloso Ancares, con sus últimos 5 kilómetros al 12% de media, recibirá a los ciclistas, tras salir de Toral de los Vados 135 kilómetros antes, y ahí ya nadie podrá escatimar en esfuerzos, viéndose claramente quién quedará para pelear esta vuelta hasta el final. El análisis más completo de la etapa lo podéis encontrar en nuestra previa.