En una vertiginosa llegada por las calles de Lleida, Alejandro Valverde cruzó la meta en 16º lugar. Sin diferencias entre los favoritos a pesar de llegar completamente roto el pelotón, el murciano se muestra sorprendido de su gran momento de forma -tras acumular ya 73 días de competición este 2018- y ambiciona más. No le vale el segundo puesto a un hombre que, a sus 38 años, no tiene nada que demostrar a nadie. Solo corre por ganar y disfrutar.
«Hasta el km 150 ha sido una etapa muy cómoda, pero las fuerzas han llegado intactas para todos al tramo final de la etapa y la velocidad en los últimos 30 kilómetros ha sido terrible… si bien al final ha conseguido llegar una fuga. Creo que mis piernas están bien; de hecho, no esperaba llegar con tan buen nivel y frescura a este tramo final de la Vuelta. Sabía que la comenzaba bien, y de ahí vinieron las dos victorias de etapa, pero no confiaba en acabar así. ¿Las palabras de Nairo? Da gusto que un compañero como él diga lo que dijo ayer. Te da mucha tranquilidad.
Mañana y pasado vienen dos días decisivos… aunque creo que la etapa del sábado, al ser tan corta y explosiva, puede pasar cualquier cosa y por eso debería ser más clave. ¿Estrategias? Son un secreto, no deben saberlas los rivales (ríe). Vamos a ver cómo va el día: cómo vamos nosotros, los rivales, observarlos y en la parte final, a ver lo que pasa. Tenemos claro que en estos dos días no nos vamos a rendir, vamos a seguir dándolo todo.
Tenemos por delante a un Yates que ha demostrado estar bien, tener un equipo potente y en especial un hermano, Adam, que lleva toda la Vuelta cómodo y ahora está entero de fuerzas, que le puede servir de gran ayuda. Por detrás está un Enric Mas que seguro irá a por la victoria. Tiene fuerzas para ello, mentalidad…»
Prensa Movistar Team