Niki Terpstra (Quick-Step Floors) se ha alzado con la victoria en la 102ª edición del Tour de Flandes-Ronde Van Vlaanderen (1.UWT, Bélgica), disputada hoy sobre un recorrido de 264,7 kilómetros entre Antwerpen y Oudenaarde. El neerlandés, vencedor ya de la Paris-Roubaix en 2014, suma su tercer triunfo de la temporada tras Le Samyn y E3 Harelbeke.
Con continuos intentos de escapada, no fue hasta el kilómetro 7o cuando acabó por conformarse la que sería la fuga del día. Con un soberbio Iván García Cortina (Bahrein-Merida), Ryan Gibbons (DDD), Pascal Eenkhoorn (TLJ), Filippo Ganna (UAD), Marco Haller (TKA), Aime De Gendt (SVB), Michael Goolaerts (VWC), Dimitri Peyskens (WBA), Floris Gerts (RNL), Pim Ligthart (RNL) y Jimmy Turgis (COF) serían, hasta el kilómetro 50, cabeza de carrera en la mítica clásica flamenca.
Cortina, posiblemente el más fuerte de los fugados, seleccionó el grupo y, a sus 22 años, se dio el gusto de pasar en cabeza por el Muur. Premio menor pero que no hace más que aumentar las esperanzas puestas en un corredor tan distinto y, a la vez, tan necesario en nuestro ciclismo.
Neutralizada su aventura al pie del Koppenberg, Langeveld, Van Baarle y Pedersen tomaban ventaja con respecto a un pelotón ya muy reducido tras los primeros movimientos de los favoritos. Lo probaron Stybar, primero, y poco después un valiente Vincenzo Nibali con Niki Terpstra a su rueda.
La táctica de Quick Step volvió a ser, como en toda la primavera belga, perfecta y efectiva. Con múltiples opciones, Tersptra colaboró con Nibali por delante mientras, por detrás, Stybar, Gilbert y Lampaert aguardaban una posible neutralización. No la hubo, y Terpstra hizo valer su experiencia y pronto se deshizo de un Nibali que, vigésimocuarto, completó una notable actuación.
El neerlandés caminaba en solitario hacia su segundo monumento y pronto dejó atrás también al terceto que durante kilómetros fue cabeza de carrera. Vanmarcke y Benoot seleccionaban más la carrera en el Oude Kwaremont pero nada podía parar a un Terpstra desbocado. Lo probó Sagan en el Paterberg, en un intento desesperado que contó con el peor secante que podría esperarse, Philippe Gilbert.
El belga neutralizó los intentos del campeón del mundo y allanó, aun más el camino a un Terpstra que, con 40 segundos, y en solitario, acariciaba ya el triunfo con solo 8 kilómetros por recorrer hasta Oudenaarde.
Así, solo, alzó los brazos como ya lo hiciera en 2014 en Roubaix. Pedersen (Trek-Segafredo), resistente hasta el fin, concluyó en segunda posición y Gilbert, vencedor de la pasada edición, completaba el cajón de otro domingo belga con idéntico resultado para los de Patrick Lefevre: éxito.