Matteo Trentin (Etixx-Quick Step) se ha alzado con la victoria en la decimoctava etapa del Giro d´Italia (2.UWT), disputada hoy sobre un recorrido de 244 km, la más larga de esta edición, entre Muggiò y Pinerolo. Con una fuga numerosa por delante y con los Alpes en la cabeza de los favoritos, la general se mantuvo sin cambios. Kruijswijk (Lotto-NL Jumbo) continúa líder.
Como era previsible, de salida se formó una escapada numerosa. 24 corredores se marcharon por delante con el beneplácito absoluto del pelotón: Domont (AG2R), Malacarne (Astana), Kung y Oss (BMC), Moser y Navardauskas (Cannondale-Garmin), Brambilla y Trentin (Etixx-Quick Step), Le Gac (FDJ), Solomennikov (Gazprom-Rusvelo), Kluge (IAM), Modolo y Mohoric (Lampre-Mérida), Lightart (Lotto-Soudal), Yamamoto y Zilioli (Nippo-Vini Fantini), Arndt y Timmer (Giant-Alpecin), Knees (Sky), Brutt, McCarthy y Rovny (Tinkoff) y Julen Amezqueta y Busato (Willier Southeast) fueron sus integrantes.
Con una diferencia siempre in crescendo y con un Lotto-NL Jumbo que por detrás simplemente se dejaba ir, parecía evidente que la victoria se jugaría entre los 24. Pramartino (2ª) haría la selección y San Maurizio, un durísimo repecho adoquinado en las calles de Pinerolo, decidiría. En lo primero acertamos. En lo segundo no tanto.
Tras varias intentonas por parte de hombres como Mohoric o Brutt, la fuga alcanzó la primera rampa del puerto. Como se esperaba, Moser (Cannondale-Garmin) y Gianluca Brambilla (Etixx-Quick Step) eran los más fuertes. La pareja de italianos abrió hueco, aunque quizás no el necesario. Por detrás, Arndt (Giant-Alpecin), Modolo (Lampre-Mérida), Rovny (Tinkoff) y un Matteo Trentin que ejercía de freno en favor de su compañero, coronaban a 30 segundos. El llano posterior al descenso les aproximó aún más; tanto que al comienzo de San Maurizio, a 2 km de meta, la diferencia era tan solo de 15 segundos.
Aceleró primero Moser y después Brambilla, pero ambos resistieron. La velocidad en el muro fue endiablada y parecía evidente que uno de ellos se llevaría el triunfo. Sin embargo, y ante la sorpresa de todos, Brambilla no cesaba de mirar para atrás. Matteo Trentin, quien había volado en el adoquín de San Maurizio, se acercaba a pasos agigantados. Moser ajeno a todo esto vigilaba a Brambilla. El italiano de Etixx, vencedor ya de una etapa en este Giro y portador durante varias jornadas de la maglia rosa, jugó hoy en favor de su compañero. Frenó el ritmo y puso nervioso a Moser.
Cuando Trentin apareció como un obús a falta de 200 m ya era demasiado tarde. Moser no tuvo capacidad de reacción. Etixx, la fuerza de Trentin y la picaresca de Brambilla le había birlado el triunfo.
Entre los favoritos “calma chicha” antes de los Alpes. Con un soberbio Enrico Battaglin (Lotto-NL Jumbo) controlando en todo momento la ascensión a Pramartino, solo Valverde en San Maurizio y Nibali en su posterior descenso osaron desafiar al líder. Al final sin diferencias. Mañana comienzan los Alpes.
