Bonito cierre de la Copa de España en un lugar que durante todo este 2016 estará de celebración, ya que en Alcalá de Henares se celebra el cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes Saavedra, sin duda, nuestro literato más ilustre. Y es que el «Manco de Lepanto» si tuviera la oportunidad de vivir en nuestro tiempo, seguro que en los ciclistas tendría un espejo importante en el que se pudiera mirar su universal hidalgo Don Quijote de la Mancha, ya que muchas cosas tienen en común. Caballeros empezinados en conquistar grandes gestas, luchando contra auténticos gigantes o molinos de viento semana tras semana y día tras día, inmersos en mil y una batallas, muchas veces tratados por locos por el resto de la gente, siempre a lomos de sus rocines escualidos, y con fieles «sancho panzas» que realicen el trabajo sucio para los que en principio son los líderes de cada equipo. Además, este año el Gran Premio Macario cumple otra bonita cifra, como es la mayoría de edad, ya que con está serán 18 las ediciones que ya tenga a sus espaldas.
Dejando de lado el simbolismo de esta prueba, no debemos obviar que aquí se va a jugar el todo por el todo de esta Copa de España, si bien es cierto que el líder de la general absoluta, Antonio «Chava» Angulo (Gomur-Liébana2017) lo tiene prácticamente hecho, ya que salvo desgracia en Alcalá se proclamará campeón de España por segundo año consecutivo. Y es que el cántabro tiene una ventaja de 91 puntos sobre su siguiente perseguidor, que es Jaume Sureda (Seguros Bilbao), por lo que le valdría acabar entre los 30 primeros, siempre y cuando Sureda fuera el vencedor. Además, José Manuel Díaz Gallego (Bicicletas Rodríguez) y Marcos Jurado (Lizarte) son los otros dos corredores con alguna posibilidad de poder llevarse el preciado maillot amarillo para su casa, aunque como ellos mismo dicen «es algo imposible», ya que incluso en una prueba que tradicionalmente se ha resulto al sprint, el mejor de todos en estas condiciones es el propio «Chava».
Y es que la de Alcalá es una carrera que acumula bastante dureza en su parte intermedia, pero que cuenta con una parte final bastante asequible para que todo pueda reagruparse y al final se decida todo al sprint. De hecho, Angulo en los dos últimos años acumula aquí un cuarto y un quinto puesto, es más el año pasado un trío se distanció en cabeza, con dos rusos del Lokosphinx, Artem Samolenkov y Vadim Zhuravlev, junto con Héctor Sáez (Caja Rural-RGA), llevándose al final la victoria Zhuravlev por delante del español, con Samolenkov completando el podium, mientras que por detrás el pelotón llegaba con más de dos minutos perdidos, y ahí Angulo era el más rápido al sprint, llevándose esa cuarta plaza.
El recorrido será el mismo que los últimos años, con una distancia de 155 kiómetros, y las ascensiones al Alto de Torres, de tercera categoría, que se subirá hasta en tres ocasiones, el Alto de Loranca, de segunda, y que tiene un desnivel medio que ronda el 7%, y rampas que se acercan al 10%, y el Alto de Pezuela de las Torres, también de tercera. La última vez que se sube el Alto de Torres se corona restando aún más de 30 kilómetros para la meta, por lo que es mucho el terreno completamente llano el que queda por delante, y en el que muchas veces el fuerte viento hace su presencia, así que salvo sorpresa como la del año pasado, la prueba de Macario generalmente se ha resulto con una llegada masiva, donde Angulo tendría muchas papeletas de volver a triunfar, y más viniendo como Egoitz Fernández o Gonzalo Serrano de competir la semana pasada por estas mismas tierras, en la Vuelta a Madrid de profesionales con la selección española, aunque en el caso del de Gomur se acabó dejando ver, y bastante, al meterse en la fuga buena de la etapa reina, demostrando el gran momento en el que se encuentra, por lo que él, el mencionado Egoitz Fernández (Fundación Euskadi-EDP) o un enrachado Jon Irisarri (Caja Rural-RGA), que llega aquí tras ganar en la última prueba de Copa de España de Santikutz y en la última etapa de la Vuelta a Bidasoa, son los que parten como máximos favoritos para el triunfo parcial.
Si no nos cansamos de decir que la general absoluta está más que decantada a favor de Angulo, el resto de generales sí que están mucho más abiertas, ya que ahí están los ya citados Sureda y Gallego, que en Alcalá se jugarán la general sub23. Sureda llega a la última prueba con 10 puntos de ventaja sobre el jienense, por lo que en este caso un par de posiciones pueden darle la vuelta a la tortilla, aunque sí debemos tener en cuenta que el mallorquín es más rápido que Gallego, que buscará intentar romper la carrera previamente para evitar un sprint, pero aún con eso, si la prueba se resolviera con una llegada masiva, todo podría acabar pasando. También está la dupla del RH+-Polartec-Fundación Contador formada por Miguel Ángel Ballesteros y Fernando Barceló, y el local Gonzalo Serrano (EC Cartucho.es-Magro), con opciones remotas de hacerse con esta general. El equipo de Contador también tiene encarrilada la clasificación por equipos, pero deberá andarse con ojo con respecto a Seguros Bilbao y Lizarte, que llegan también con posibilidades de llevarse esta clasificación. Los navarros además de luchar por la general por equipos y apoyar a Jurado para que entre en el podio definitivo de la Copa, deberá defender su liderato de la Montaña que está en manos de Marcos Rojo. Las Metas Volantes es cosa, hasta la fecha, de Alberto Ruíz (Bicicletas Rodríguez), pero en su caso aún teniéndolo bastante encarrilado, es cierto que es la clasificación que tiene mayor número de pretendientes.
Y ADEMÁS…
Aunque está claro que todos miraremos el domingo hacia Alcalá de Henares, no debemos obviar que ciclismo y del bueno habrá en más lugares. Principalmente en el País Vasco, donde tras unas semanas en las que el Torneo Euskaldun ha sido el que ha llevado el protagonismo, en este fin de semana regresará el Torneo Lehendakari, y lo hará con mucha fuerza, ya que se disputarán dos pruebas. Cabe recordar que hasta la fecha tenemos un líder sólido como Gotzon Martín (Fundación Euskadi-EDP), que siempre está tanteando los puestos de honor aunque todavía ha sido incapaz de levantar los brazos en ninguna de las siete pruebas disputadas hasta la fecha. Josu Urrestarazu (Ampo), Sergio Samitier (Lizarte) o su compañero en Fundación Euskadi-EDP, Cyril Barthe son sus principales perseguidores en la general. El sábado será el turno para la Loinaz Proba en Beasain, que cumplirá su 66ª edición. 124 kilómetros de mucha dureza, en la que se deberán pasar hasta cuatro puertos de montañana, como el Alto de Eizaga, el Alto de Mandubia, y el Alto de Olaberria, este último hasta en dos ocasiones ya en los últimos 20 kilómetros, coronándose por segunda vez a tan solo 6 kilómetros de la meta en Beasain. Sin duda mucho terreno para poder marcar diferencias, como ya hizo el año pasado Jaime Castrillo para vencer en solitario sacando minuto y medio en meta a sus perseguidores.
Al día siguiente más de lo mismo en tierras donostiarras con la celebración en este caso de la 81ª edición de la Pentekostes Saria en Bergara, una de las pruebas más longevas de todo nuestro calendario. En este caso serán 126 kilómetros de recorrido relativamente tranquilo, aunque por un terreno rompepiernas durante todo el día, como es normal en esta zona, hasta llegar a los últimos 40 kilómetros, donde se tendrá que ascender en dos ocasiones a Asentzio, puerto de casi 8 kilómetros y bastante dureza en su parte final, donde los últimos tres kilómetros están siempre alrededor del 8% y 9%, además de contar con zonas como al paso por Angiozar en donde las rampas llegan al 12% de desnivel. A 15 kilómetros de meta se corona para arrancar con un rápido y técnico descenso, quedando después algo menos de 10 kilómetros hasta meta por un terreno en el que dar pedales. La meta se sitúa en una dura rampa de Bergara donde el año pasado Diego Tirilonte se impuso al sprint en el reducido grupo de 6 ciclistas que se jugó la victoria.