No hay dos sin tres, y tras un par de fines de semana consecutivos disfrutando de ciclismo de altura con la Copa de España en Guadiana y Guerrita, no podía ser que no pudiéramos volver a vivir esta emoción un tercero. El pelotón amateur se traslada al norte tras su periplo por tierras pacenses y murcianas, para desembarcar en Guipúzcoa con la disputa de la 13ª edición de la Aitzondo Klasikoa.
Ya el pasado fin de semana pudimos ver las primeras batallas en la montaña con el Alto de la Perdiz como protagonista que nos dejó a un Álvaro Cuadros desatado levantando los brazos en Alcantarilla de manera más que sobrada, pero con la llegada de la prueba vasca la orografía escarpada pasa a ser la única protagonista, y eso que este año los ciclistas no se enfrentarán al duro muro de Alkiza como final de la prueba, sino que se reservará para antes. Una edición la del año pasado que nos dejó una de las muchas exhibiciones que realizó el Fundación Euskadi a lo largo de la temporada con Mikel Iturria llegando con ventaja a pie de puerto sobre el grupo de favoritos, valiéndole la distancia para llegar victorioso a la línea de meta, siendo acompañado en el podio por Rafa Márquez y Nacho Pérez, eso sí, el compañero de Iturria por entonces Egoitz Fernández pasaba a liderar la general de la Copa de España que finalmente acabaría segundo.
En esta ocasión, como hemos dicho la prueba no concluirá con un final en alto, pero esto no restará un ápice de emoción a los 138,6 kilómetros que separarán la salida de Zizurkil de la llegada en Asteasu. El alto de tercera categoría de Aduna será juez de la carrera con sus cinco pasos, el último de ellos a tan solo 9 kilómetros de la meta, con un ascenso previo a la dura subida de Alkiza que seguro ya dejará bien seleccionado el grupo de hombres fuertes que estén pugnando por el triunfo.
Cierto es que con este final el abanico de posibles vencedores aumenta con respecto al final del año pasado mucho más propio para escaladores, lo que sí está claro que a la meta de Asteasu si no logra sorprender algún hombre mucho más fuerte que el resto desde lejos repitiendo lo que hizo Cuadros en Guerrita, el grupo de corredores que peleará por el triunfo no será ni mucho menos numeroso. Mucho ojo también a la climatología que pueda aún endurecer mucho más la prueba vasca, y los pronósticos no son nada favorables a los ciclistas.
Por lo tanto entre los gallos veremos si Juan Camacho (RH+-Polartec-Fundación Contador) es capaz de sujetar tras esta prueba el maillot amarillo de líder de la general de la Copa de España o tiene que delegarlo en algún otro ciclista, teniendo entre sus compañeros a alguno de los favoritos a sucederle como es el caso de Miguel Ángel Ballesteros, tercero a tan solo cuatro puntos del dúo de cabeza formado por Camacho y Óscar Pelegrí (Seguros Bilbao), y sin olvidarnos, por supuesto, de Álvaro Cuadros que dejó patente hace una semana el excepcional momento de forma en el que se encuentra. los Egoitz Fernández (Fundación Euskadi-EDP) que intentará recuperar el cetro perdido en Murcia para volverse a vestir de amarillo como ya hiciera hace un año, o Jon Irisarri (Caja Rural-RGA) serían dos de los hombres a tener en cuenta si nadie dinamita la carrera en las diferentes ascensiones a Aduna, y ahí tendrán mucho que hacer los Marcos Jurado (Lizarte), José Manuel Díaz Gallego (Bicicletas Rodríguez), Unai Intziarte (Aldro Team) u Óscar Hernández (GSport).
Lo que está claro que seguro habrá movimientos en carrera que sin miedo a equivocarnos provocarán movimientos en la general de esta apasionante Copa de España que no ha hecho más que empezar.
Y ADEMÁS…
Si hace una semana señalábamos que no todo sería Copa de España con el arranque del Torneo Euskaldun en Zumaia que deparó el primer triunfo en la historia del conjunto cántrabro del Aldro Team, esta semana ocurre algo parecido, aunque en esta ocasión sí que se centrará todo en el País Vasco, ya que a la prueba de la Copa de España que se celebrará el domingo en Asteasu, habrá que añadir el sábado el arranque esta vez del Torneo Lehendakari, que como todos los años nos dejará unas preciosas batallas entre los mejores sub23 de nuestro pelotón amateur en busca de hacerse con la preciada «txapela» que suceda a la conseguida hace un año por Jonathan Lastra y que acabó por servirle para dar el salto con los «mayores» del Caja Rural-RGA.
El arranque se producirá con la bonita prueba de Ereño de 106 kilómetros y que tendrá su punto culminante en la dura ascensión a Natxitua cuya cima se encontrará a tan solo 5 kilómetros de la llegada, y que el año pasado sirvió a Julen Amezqueta para marcharse en solitario y alzarse con la victoria. Señalar un favorito es poco menos que imposible al ser la primera de las pruebas de esta competición, con muchos equipos reservando a sus hombres más fuertes para el día siguiente estar frescos en Aitzondo, o con muchos corredores que doblarán en ambas pruebas, por lo que cualquier cosa podría pasar.
Fuente Imagen 1: RFEC; e Imagen 2: FVC