El velódromo de Galapagar (Madrid) acogió la primera prueba del Open de España de ciclismo en pista, que volvía de esta forma a disputarse tras cinco años ausente. En las pruebas femeninas —vuelta lanzada, keirin y puntuación para todas las categorías, scratch para élites, eliminación para juveniles y élites y danesa para cadetes— hubo una afluencia de alrededor de cincuenta corredoras, y Melisa Gómiz (Comunitat Valenciana), Eukene Larrarte y Ana Usabiaga (Euskadi), Isabel Ferreres (Comunitat Valenciana) y Gudane Araiz (Reyno de Navarra-WRC-Conor) son las primeras líderes de la competición.