Velocio-SRAM sumó en el Mundial de Richmond su cuarto título consecutivo de campeonas del mundo de contrarreloj por equipos, tras haber logrado también los entorchados de Limburgo 2012, Toscana 2013 y Ponferrada 2014. Pero en esta ocasión, a diferencia de las otras tres veces, lo hizo muy por los pelos. Tan solo 6 segundos separaron al equipo de Kristy Scrymgeour del Boels Dolmans, que solo podía ser segundo tras haber ido de menos a más, teniendo que disputar solo con cinco corredoras por un inoportuno pinchazo de Christine Majerus en los primeros kilómetros. El bronce se lo llevó Rabobank-Liv, que decepcionó en una crono en la que partían como principales favoritas a ganar.
Wiggle, Rabo y ORICA, eliminadas de inicio
Con la salida de los primeros equipos, los estadounidenses intrascendentes invitados para cubrir un mínimo aceptable de plazas, el primer conjunto potente en enfilar la rampa de salida fue el Hitec Products, que solo podía iniciar su concurso en Richmond con cinco corredoras ya que un comisario denegó a Charlotte Becker la participación por «llevar un manillar 1 milímetro más largo de lo permitido». Con esto, la formación noruega no pudo pelear puestos de honor.
La lucha de los equipos más potentes comenzaba con el mencionado Boels Dolmans como el primero en arrancar, y pese a la pérdida de Majerus no vacilaron en ir a por todas en busca de un oro que se les complicaba. Por el primer paso de cronometrado intermedio cruzaron en primera posición, y ni Wiggle Honda ni Rabobank-Liv ni ORICA-AIS podían mejorar su registro. Solo Velocio-SRAM, 11 segundos mejores, fueron capaces de rebajar el tiempo de las neerlandesas.
La cota final da el oro a Velocio-SRAM
Desde ese punto ya se vio que la lucha iba a ser de dos, y se cerraba más aún cuando en el segundo intermedio Boels Dolmans era ya solo seis segundos peor que Velocio-SRAM, mientras RaboLiv continuaba su decepcionante crono, muy alejadas. Al paso por el tercer parcial Boels Dolmans marcaba el mejor registro, RaboLiv estaba a 49 segundos, llegaba Velocio-SRAM y… ¡bam! 6 segundos peor que Boels Dolmans. ¿Iba a haber sorpresa?
Pues no. Y fue por el terrible sufrimiento de Ellen van Dijk, lejos de estar en su mejor forma, para subir la última colina, la subida más dura de la jornada. Eso penalizó al equipo neerlandés y benefició a Velocio-SRAM, que ya con indicador de GPS era 6 segundos mejor en esa cota. Precisamente fueron 6 los segundos del equipo teutón en meta, que lograba su título por delante de Boels Dolmans y de Rabobank-Liv, si bien estas últimas lo pasaron muy mal en la subida final aunque Anna van der Breggen, en un esfuerzo supremo, se echó a la espalda al equipo y logró el bronce.