Por Yolanda Álvarez
Las competiciones mundialistas, en esta ocasión Richmond 2015, son siempre pruebas fascinantes. Están las mejores corredoras del mundo, los perfiles de carrera son de los más exigentes del año, se corre por selecciones nacionales y hay muchas aspirantes a las ansiadas medallas.
La CRE, sin embargo, lo es un poco menos porque no cumple una de las premisas anteriores. Se corre por marcas comerciales, y no por naciones. Y eso le quita una buena dosis de interés y, dicho sea de paso, morbo. Ojalá esta disciplina que aún está en pañales (recordemos que se instauró hace tan solo 3 años), en años futuros se dispute con corredoras y corredores alineados, aerodinámicos y defendiendo los colores de su país, por el bien de la homogeneidad mundialista y del espectáculo.
Los datos de Richmond
Con todo, Richmond nos presenta un circuito ideal para que los equipos mejor acoplados y potentes ocupen las plazas del podio. 38,8 kilómetros de dolor y velocidad donde un par de cotas en los últimos kilómetros pueden marcar las diferencias.

A priori, las medallas han de repartirse entre los tres equipos que dominaron en Vårgårda, el único y reciente test fiable de la temporada para esta especialidad. Allí, RaboLiv se llevó el oro, poniendo fin a la hegemonía de las 3 ediciones anteriores del Velocio-SRAM. Boels Dolmans completó el podio, pero hay circunstancias que podrían jugar a favor y en contra de los tres, a saber:
- La escuadra Velocio-SRAM, como ya sabemos desde hace semanas, pone fin a su exitosa andadura, y querrá hacerlo como lo que han sido en estas temporadas pasadas: la escuadra dominadora de las CRE. Seguramente habrán tomado nota de sus desajustes de Vårgårda y saldrán a ganar. Nada más les vale y lograrlo en Richmond sería una victoria emocionante para todos, corredoras y espectadores, pues marcaría el fin de una era de dominio de esta especialidad por parte del conjunto germano.
- Las neerlandesas del RaboLiv han subido el peldaño que les faltaba y parten como favoritas tras su exhibición de conjunto por tierras suecas. La suma de individualidades a tope de su condición física tiene que hacerlas volar hoy, y más si recordamos la auténtica desgracia ocurrida en Ponferrada hace un año, donde perdieron a medio camino a una Marianne Vos mermada ya por su lesión y luego se fueron al suelo cuando estaban marcando los mejores tiempos.
- Terceras en discordia, pero prácticamente con las mismas garantías de medalla que sus rivales, nos encontramos a las Boels Dolmans. A su favor tienen el haber recuperado a su gran especialista Ellen van Dijk, ausente en Vårgårda por lesión. Ella puede marcar las diferencias en Richmond, aunque está por ver si la varias veces campeona del mundo (individual y por equipos) de la lucha contra el crono llega al 100 % a Richmond, aunque eso lo veremos mejor en la CRI del martes.

Difícil será que otro equipo se suba al podio de Richmond 2015: Wiggle Honda, Orica-AIS o UnitedHealthcare no disponen del mismo potencial contra el crono que los anteriores, aunque el equipo estadounidense podría dar la campanada con la motivación extra de correr ante su público.
Esta incertidumbre y la magia de esta preciosa especialidad podremos seguirla desde las 17.30 horas (hora española) en directo por el canal UCI de YouTube y por Teledeporte.
Y por supuesto por nuestra mayor y mejor fuente de información y disfrute de ciclismo femenino: por Twitter con el hashtag #Richmond2015.