No ha podido ser. Alberto Contador no ha conseguido la victoria en el Tour de Francia, y por tanto, no ha podido lograr el doblete Giro-Tour que se planteó tras ganar la Vuelta a España del año pasado. El madrileño ha finalizado en una 5º posición que sabe a poco. «He hecho un Tour digno, pero no estoy contento.» Y es que al madrileño sólo le vale ganar. La carrera se le puso difícil a las primeras de cambio, cuando la colosal exhibición de Froome en la Pierre de San Martin le dejó a 4 minutos del británico en la general. Contador mostró mejores sensaciones en los días posteriores y, al iniciar los Alpes, rozaba el podio. En la primera jornada alpina atacó a 80 kilómetros de meta y, pese a que no logró dejar sólo a Froome y fue cazado, dio un aviso. Estaba en Francia para ganar. Su estado de forma había mejorado e iba pelear por la carrera. Sin embargo, kilómetros después, una desafortunada caída en una de las primeras curvas del peligroso descenso del Col d’Allos le hizo perder 2:30 con el resto de favoritos. En las rampas de Pra Loup, Contador perdía cualquier opción de vestir de amarillo en París.

Pero bien es sabido que Alberto Contador no se rinde. Con la carrera perdida, magullado por la dura caída sufrida el día anterior, el pinteño arrancó «con más corazón que piernas» en el Col du Glandon, llegando a coronar el coloso alpino con unos segundos de ventaja que se vieron disipados en el descenso. Pero las piernas de Contador, que dos meses atrás habían pedaleado por Italia en pos de ganar el Giro, no dieron para más. En La Toussuire y en Alpe D’Huez aguantó a duras penas, ayudado por su compañero Majka, la 5º posición en la general. Criticado además por el pique deportivo que ha tenido con su compatriota Alejandro Valverde, está claro que este no ha sido el Tour de Contador. El madrileño ha corrido dos veces el Giro y el Tour en una misma temporada (2011 y 2015), ambas con idéntico resultado: victoria en el Giro y 5º puesto en el Tour. «Sigo pensando que el doblete Giro-Tour es posible, pero necesitas a un equipo que te lleve en volandas».
Aún así, hay que valorar lo que ha hecho Contador. Ha ganado uno de los Giros más duros del siglo, y ha tenido capacidad física y mental para dar la cara en el Tour. Puede parecer fácil, pero el líder del Tinkoff Saxo ha competido en Francia contra rivales que han preparado única y exclusivamente la ronda gala. Contador, que como comentaba ayer en París tiene ganas de desconectar de la bicicleta e iniciar un merecido y largo descanso, está orgulloso de haberlo intentando. El pinteño, que dará por terminada su temporada el próximo sábado en la Clásica San Sebastían, ya piensa en 2016, donde «cambiará por completo su preparación» para tratar de lograr la victoria en sus grandes objetivos en el que, en teoría, será el año de su despedida: el Tour de Francia y los JJOO de Río de Janeiro. En cuanto al doblete Giro-Tour no logrado, Contador alegaba «tener que intentarlo. No podía retirarme sin intentarlo».
