Cuando hace ya 40 años el Canibal enfilaba vestido de amarillo los primeros kilómetros de aquella fatídica decimoquinta etapa, pocos o ninguno eran los que se aventuraban a pensar que la subida a Pra-Loup sería la tumba de quien había devorado los registros de la historia reciente del Tour. Una subida de escasa longitud para lo habitual en tierras alpinas y con una pendiente que rara vez supera el 8 % fue aquel día el lugar de una abdicación improvisada, la de aquel que había sido el Rey del Tour tantos y tantos años y que en esa jornada se arrastraba cual gregario minutos detrás de un Thevenet impulsado por toda una Francia unida contra el “absolutismo” del belga. ´
En aquella ocasión fueron varios los puertos que los corredores tuvieron que afrontar la ascensión final. Cuatro “hors categorie” y casi 230 kilómetros sirvieron para hacer saltar por los aires más de un lustro de hegemonía. Mañana la etapa no será tan exigente. Dos escollos de tercera categoría y uno de segunda categoría antes del encadenado final llamado a ser decisivo en el transcurso de la etapa: Allos-Pra Loup.

El ascenso al Col d´Allos rebasa ampliamente la barrera de los 2000 m de altura situándose su cima a unos intimidantes 2250 m. Para llegar allí los corredores tendrán que ascender durante los 15 kilómetros de puerto desde el inicio del mismo en la localidad de Allos. Los porcentajes iniciales se mantendrán constates en torno al 5 % hasta alcanzar en el último tramo porcentajes del 8-9 %. Sin embargo, el coloso francés esconde un falso llano previo puerto de casi 25 kilómetros que sin duda desgastarán las piernas de los corredores de cara a esos últimos kilómetros. Coronado Allos, un descenso rápido hasta la, ya mencionada, ascensión final a Pra Loup.

La primera de las etapas alpinas, para nada la más dura, pero al fín y al cabo, la dureza la generan los corredores. Corredores como Nairo, Contador, Valverde, Van Garderen o Nibali están obligados a mover la carrera. No lo estará sin embargo a hacerlo Chris Froome. El británico llega al último bloque de montaña con una importante ventaja con el resto de sus perseguidores. Aún así, ¿si allí pereció Eddy Merckx, el mejor ciclista de todos los tiempos, por qué no lo puede hacer mañana el líder del Sky?