Lunes, 27 de julio. Uno de los días más largos de este verano. El adiós del Tour nos deja a todos desangelados. El calor se hace notar mucho más. Las horas de después de comer son interminables. A muchos les cuesta coger el sueño de la siesta sin tener la voz de Perico de fondo, otros muchos vuelven a recordar la basura de programas que hay a esas horas en la televisión, y otros tantos se consuelan viendo las reposiciones de Teledeporte o Eurosport, viviéndolo como si no supieran que al final Quintana se quedaría a algo más de un minuto de Froome. Bueno, pues con todo y con eso, el ciclo de la vida sigue, y el ciclismo continúa. «The Show must go on». Sin apenas tiempo de lamentarnos, ni poner chorradas cual quinceañeras, como «Día -300 y pico para el próximo Tour, ¡Qué ganas!», arranca este miércoles, 29 de julio, otra de las carreras con más historia de nuestro deporte. Aunque por nombres participantes, podamos decir que es una carrera de segunda fila, la Volta a Portugal, siempre ofrece un espectáculo digno de admirar, con la afición portuguesa volcada con sus ciclistas, y con unos recorridos, que hace que nos volvamos a «embobar» delante del televisor o del portátil. Además, egoistamente, la carrera lusa es española, ya que mismamente, de las últimas 10 ediciones, 8 han sido conquistadas por corredores nuestros.
EDICIÓN 2014
Y la del año pasado no escapó a esta tendencia, con un Gustavo César Veloso, que prácticamente desde el primer día se mostró como un ciclista al que iba a estar complicado meter mano. Finalmente, en Lisboa, el gallego acabó llegando con 1:45 de ventaja sobre el portugués, Rui Miguel Sousa, y cerrando el podio, el también español, y compañero de equipo, OFM-Quinta da Lixa, de Gustavo, Delio Fernández.
La Volta acabó, como empezó, con un español sonriendo, ya que en el prólogo inaugural, era Víctor de la Parte, quien se llevaba la victoria por delante de Cesar Veloso, conviriténdose así en el primer líder de la carrera. Ese día, Luisle hacía tercero. Las dos primeras jornadas en línea se decidieron al sprint, con triunfos para el alemán Phil Bauhaus, que volvería a levantar los brazos en la sexta jornada, y el italiano Davide Vigano, que le otorgaba una victoria muy importante al conjunto navarro del Caja Rural-RGA. Al día siguiente, en la primera etapa de montaña, de nuevo volvería a llevarse el gato al agua un equipo nuestro, el Burgos-BH, con un excepcional David Belda que volaba en Montalegre, cima que además hacía que el amarillo pasara ya a las espaldas del vencedor final. El mismo Belda volvería a triunfar dos días después de manera muy similar en Santo Tirso, superando con un espectacular ataque en las últimas rampas a todos los grandes favoritos. Por medio, era Edgar Pinto, el que daba el primer triunfo portugués de esa Volta, en una dura llega como Mondim de Basto.
El séptimo día, llegaba la mítica ascensión a Torre, donde el líder Gustavo César Veloso, pasaba un día «regular», aún así se fijaba a la rueda de Edgar Pinto, y no la soltaba en ningún momento, gracias entre otros al gran trabajo hecho en esa última subida, por su compañero Delio Fernández. Con el que no podía, era con Sousa, que se marchaba en solitario para alcanzar de manera muy destacada la cima, algo que le acabaría valiendo para entrar en el podio definitivo. El ruso Sergey Shilov se haría al sprint, con la etapa más larga de esa edición de casi 200 kilómetros, previa a la definitiva contrarreloj, en la que Gustavo Cesar Veloso se salía del mapa, superando en 55″ a Víctor de la Parte, que era segundo, y más de minuto y medio a su máximo rival de la general, Rui Sousa, dejando sentenciada la carrera. En la última etapa, en el «paseo» de los campeones por Lisboa, Cardoso conseguía una victoria merecida, tras rozarla en varias ocasiones.
RECORRIDO
Prólogo: Viseu – Viseu; 6km (CRI)
La «Grandissima» seguirá un patrón, prácticamente, idéntico al del año pasado, con las mismas llegadas en alto, y con dos pruebas cronometradas, arrancando la carrera con un prólogo de 6 kilómetros, totalmente planos, que nos dejarán la primer líder de la carrera, y muy pocas diferencias entre los mejores.
Etapa 1: Pinhel – Bragança; 196,8 kilómetros
La primera etapa en línea, será la más larga de esta edición con casi 200 kilómetros de recorrido, por un terreno muy quebrado, en el que controlar la carrera para un hipotético sprint va a ser complicado. Un puerto de segunda, como Serra de Bornes, ya pondrá en aprietos a más de uno, y un par de repechos en la parte final de la etapa puede que nos deje la primera sorpresa de este año. La meta además pica ligeramente hacia arriba, por lo que será una llegada perfecta para hombres de mucha explosividad.
Etapa 2: Macedo de Cavaleiros – Montalegre (Serra do Larouco); 175,6km:
Primera llegada en alto de esta Volta, en el mismo lugar que lo hizo el año pasado, en una etapa con cuatro puertos de montaña, finalizando en un puerto de primera, como es Montalegre, que no es largo pero que sí cuenta con rampas muy duras. Aquí el año pasado venció David Belda, y el ciclista que levante los brazos este año deberá ser de un corte muy parecido al alicantino
Etapa 3: Boticas – Fafe; 172,2
Día que los grandes velocistas no deberán dejar pasar, ya que a la meta de Fafe se llegará tras uno de los días más «tranquilos» de esta edición, y entre dos etapas de montaña donde los de la general, seguro que ofrecerán mucha batalla, por lo que aquí habrá tregua. Los dos últimos kilómetros, vuelven a tener su miga, con la pendiente continuamente desfavorable a las piernas de los ciclistas.
Etapa 4: Alvarenga – Mondim de Basto (Serra da Graça); 159,4km
Etapa muy dura, ya que siendo de las más cortas, es de las que más desnivel positivo acumulado tiene. 4 puertos de montaña, con dos terceras, y dos primeras, estos últimos encadenados en la parte final de la carrera. La llegada en Mondim de Basto, es una subida muy exigente con sus 9 kilómetros a más del 7% de media, y con rampas que superan el 10%. Los últimos tres kilómetros son continuos al 8%, por lo que sin duda estamos hablando de una ascensión para los mejores escaladores.
Etapa 5: Braga – Viana do Castelo (Santa Luzia); 169,4km
De nuevo llegada con trampa. Tras una etapa bastante apacible para los ciclistas, con 160 kilómetros bastante llanos, que apenas harán sufrir al pelotón, la meta en Viana do Castelo, volverá a reventar los pulsómetros de los ciclistas, ya que se trata de una nueva llegada en alto, en este caso, a un puerto de tercera categoría, de apenas 4 kilómetros, pero que de nuevo pondrá a los ciclistas en el disparador. Veremos si se permite que una fuga se juegue el triunfo aquí, o por detrás se buscará que los ciclistas más potentes puedan pelear por la victoria en las rampas finales. Entre los de la general, no debería haber apenas diferencias.
Etapa 6: Ovar – Oliveira de Azeméis; 154,1km
Los sprinters puros lo tendrán realmente difícil en esta Volta a Portugal. La sexta etapa seguirá el guión del día anterior, con una etapa, más o menos llana, sin ninguna cota puntuable, aunque con varios repechos en la parte final, que si se imprime un ritmo fuerte en el pelotón hará que muchos sufran. La meta en Oliveira de nuevo estará colocada en uno de esos repechos, de apenas 1 kilómetro, pero bastante exigente, que seguro que permite abrir el abanico de aspirantes a la victoria. También, podría ser un buen día para que la escapada saliera vencedora, y más cuando al día siguiente tenemos la etapa reina.
Etapa 7: Condeixa-a-Nova – Seia (Torre); 171,3km
Día grande en Portugal con la subida a Torre. Sin duda, el puerto más mítico del país vecino. Este año ya vimos al pelotón pasar por allí en la segunda etapa de la Vuelta a Castilla y León, en una de las etapas más dantescas de este año, con la prueba neutralizada en la cima, por la nevada que les cayó, que hacía impracticable el descenso. Será difícil ver nevar a finales de julio, pero seguro que vemos mucha batalla y mucho sufrimiento. Los escaladores de la general deberán buscar darlo todo en esta última oportunidad para ellos y poder sacar ventaja antes de la decisiva crono del penúltimo día. En esta ocasión, la organización no ha puesto la dureza del la edición del año pasado, apostando por prácticamente una jornada donde todo irá bastante tranquilo a pie de Torre, ya que anteriormente se habrán subido un repecho, que viene catalogado como tercera, y un puerto de segunda como el Alto de Teixeira. De la última subida poco podemos decir, 21 kilómetros ascendentes donde apenas hay una sombra, ni protección contra el viento, con un comienzo muy duro con medias constantes al 7% y 8%, una parte central con 3 kilómetros más cómodos, y de nuevo con los últimos 6 kilómetros por encima del 7% de media. De aquí, ya tendrá que salir un líder consolidad, y los pocos aspirante a birlarle el amarillo en la crono final.
Etapa 8: Guarda – Castelo Branco; 180,2km
Paz para los ciclistas. Etapa muy cómoda, en la que seguramente se vaya rapidísimo. Día ideal para los sprinters, que en Castelo Branco, por tradición, tienen siempre una cita con la victoria. Al día siguiente todo se decidirá en prueba contra el reloj, por lo que seguro que habrá bastante tranquilidad en el seno del pelotón.
Etapa 9: Praia de Pedrógao – Leiria; 34,2km (CRI)
Sería injusto decir que todo lo hecho hasta ahora para los que estén peleando por la victoria final, habrá servido de poco, pero casi. Y es que una crono individual totalmente plana, después de todo el castigo que se lleva en las piernas, y en donde el viento puede ser también un factor determinante, puede poner la carrera patas arriba, y que veamos diferencias mayúsculas. El triunfo de este día, seguramente será para alguno de los que estén peleando por subir a lo más alto del podio al día siguiente, ya que más que para especialistas será para los que lleguen con más fuerzas guardadas a este final de Volta a Portugal.
Etapa 10: Vila Franca de Xira – Lisboa; 132,5km
Últimos metros de la Volta a Portugal, donde se rendirá homenaje al vencedor. A la llegada a Lisboa se darán 6 vueltas a un 6 vueltas a un circuito completamente plano, que dejará la última llegada al sprint, salvo sorpresa mayúscula. Tras ello, las celebraciones y fotos habituales en el podio. Se habrá acabado la Volta a Portugal, pero por supuesto, no el ciclismo.
FAVORITOS
Como ya hemos señalado la «legión española» en Portugal deberá ser, de nuevo, muy a tener en cuenta. Lógicamente, el dorsal «1» será en el que estén todas las miradas puestas, por lo que Gustavo César Veloso (W52-Quinta da Lixa) será uno de los máximos favoritos a reeditar triunfo, en una ronda muy similar a la del año pasado, y que tan bien se le adapta a sus cualidades. En contra, tiene el no haber conseguido ningún resultado reseñable en este 2015. Su compañero de equipo, Delio Fernández, que ya fue tercero el año pasado, sí que llega con buenos resultados, como el segundo puesto final en el Trofeo Joaquim Agostinho, que se le escapó en la última etapa. Segundo puesto que también consiguió a principio de año en Alentejo, o el extraordinario quinto en Castilla y León. ¡Ojito con Delio!
El vencedor de hace dos años, Alejandro Marque, también seguro que buscará hacer una gran carrera, además en el seno de un gran equipo como Efapel donde estará muy bien respaldado por grandes ciclistas como David de la Fuente, Diego Rubio o Arkaitz Durán. También habrá que tener muy en cuenta a los nuestros del Caja Rural-RGA, que aunque el núcleo duro lo hayan guardado para Burgos, aquí vendrán con Javier Aramendia, Eduard Prades, el colombiano Heiner Parra y los locales Ricardo Vilela y José Gonçalves. No debemos dejar de lado tampoco la figura de Alberto Gallego (Radio Popular ONDA Boavista), en el que está siendo un gran año para él, con podios en Madrid o Agostinho. Por último, señalar la figura de Jordi Simón, que este año consiguió un enorme triunfo en tierras lusas en Trofeo Alpendre do Guadiana, y que el año pasado ya realizó una gran carrera en la Volta a Portugal, hasta que una desgraciada caída en la sexta etapa le hacía decir adiós al día siguiente. Además, el catalán del Team Ecuador tendrá a su lado a Byron Guama, otro de esos «outsiders» a vigilar.
En cuanto a los portugueses, que buscarán acabar con la hegemonía española allí, debemos destacar al segundo del año pasado, Rui Sousa (Radio Popular ONDA Boavista), o también a Ricardo Mestre (Tavira), o el vencedor del reciente Trofeo Agostinho Joäo Benta, y sus compañeros del Louletano Hugo Sabido y Sandro Silva, que junto con los ya citados del Caja Rural, serán las principales esperanzas de los aficionados portugueses.
De fuera de la Peninsula Ibérica, veremos que papel realizan los italianos del Team Idea 2010 ASD, con un Luca Cappelli, que a Portugal llega fuerte como demostró con un extraordinario sexto puesto en la dura Ordizia del pasado sábado. Para acabar también señalaremos, la gran campaña que vienen realizando los rusos del Lokosphinx, con Evgeny Shalunov y Sergey Shilov a la cabeza.