El Club Ciclista Rías Baixas fue el único representante español que participó este fin de semana en la Volta ao Alto Tâmega en Portugal y dio la talla frente a los conjuntos profesionales del pelotón luso. La actitud competitiva que mostró la formación miñorana obtuvo su recompensa en la última jornada con Jose Manuel Gutiérrez luciendo el maillot rojo del premio de la combatividad. Además, la estructura que dirige Marcos Serrano terminó como la segunda mejor escuadra amateur.
«Estoy contento. Era una carrera muy dura y nuestros corredores estuvieron a un nivel muy interesante», indica el director deportivo del equipo del Val Miñor. El buen rendimiento de sus pupilos propicia que «organizadores de otras carreras nos hayan transmitido que desean contar con nosotros en sus carreras».
Serrano destaca el desparpajo de sus ciclistas más jóvenes como Samuel Rodríguez, que en la etapa reina del sábado estuvo escapado durante 140 kilómetros. Al día siguiente, Cristian Mota y Jose Manuel Gutiérrez se quedaron a punto de sorprender al pelotón en una fuga junto a otros cuatro corredores. «Los cazaron a diez de meta. En una vuelta de profesionales no es fácil ver a dos representantes de un equipo Élite y Sub 23 como el Club Ciclista Rías Baixas en una escapada de seis». Esa actuación le sirvió a Gutiérrez para subir al podio y recoger el maillot rojo de la combatividad del primer sector de la tercera etapa.
El corredor cántabro, que se incorporó recientemente a la estructura miñorana, fue el mejor clasificado del equipo en la general final ocupando la 32ª plaza y cuajó una notable actuación en la etapa reina entrando entre los 25 primeros. Aser Estévez, Cristian Mota, Samuel Rodríguez y David Pérez también completaron la carrera. De los 120 corredores que iniciaron la prueba, terminaron 52.
«Desde que acabó la Copa de España el equipo está ofreciendo su mejor versión», apunta Serrano, que ya prepara nuevos objetivos como el Campeonato de Galicia a principios del mes de junio.