Esta tarde, la Unión Ciclista Internacional (UCI) ha anunciado en un comunicado a través de su página web la decisión de no retirar su licencia WoldTour al equipo Astana.
Los casos de dopaje que salieron a la luz en el equipo y su filial, provocaron que la Comisión de Licencias abriera una investigación. Llegaron a amenazar con retirarle de la máxima categoría, pero finalmente se ha decidido permitir la continuidad del equipo, aunque «estará sujeto a un estricto control para velar por el cumplimiento de las condiciones» impuestas por el Instituto de Ciencias del Deporte de la Universidad de Lausanne (ISSUL).
En el comunicado, la UCI se muestra inflexible, y anuncia que la Comisión de Licencias tiene potestad para reabrir el caso «si se incumple alguna de las condiciones o surgen nuevos elementos» que puedan influir en el caso.
Así pues, Astana Team dispone de plenas garantías para disputar todas las grandes pruebas del calendario, aunque sujeto a la supervisión de distintos organismos y a prueba de nuevos casos de dopaje.