Día para una escapada. Al día siguiente los favoritos de la general deberán darse palos de lo lindo porque se supone que se resolverá la carrera, y teniendo en cuenta que es una jornada en la que se ascienden dos puertos de segunda categoría como Monte da Groba, donde venció el año pasado Nicolas Roche, y Monte Faro que estará situada su cima a tan solo 15 kilómetros de la meta, por lo que los sprinters no tendrán muchas opciones por lo que no será raro que se deje caminar a una fuga numerosa y que por detrás la jornada se viva de manera tranquila.