Miguel Ángel López consiguió llevarse la general de una carrera en la que hubo alternativas hasta la última etapa. La selección española jugó un papel discreto.
La prueba la abría un prologo de 4,4 km en el que se impuso el australiano Campbell Flakemore bajo un aguacero, que hizo que los favoritos no arriesgasen para evitar exponerse a una caída, por lo que la etapa fue intranscendente prácticamente para la general. Al día siguiente comenzaba lo bueno con muchas opciones de ver una volata en meta, pero no fue así, se formó un trío compuesto por el noruego Kristoffer Skjerping, el neerlandés Sjoerd Van Ginneken y el danés Asbjorn Kragh Andersen que consiguió llegar con 2’21» a meta, siendo el danés el ganador de la etapa, y el noruego líder de la carrera. Al día siguiente la selección danesa salió con el claro propósito de controlar, y la fuga compuesta por el francés Loïc Chétout y el suizo Fabien Lienhard nunca obtuvo más de cuatro minutos de ventaja. Al final la victoria se la jugaron al sprint en un repechillo, imponiéndose el australiano Caleb Ewan con bastante claridad sobre el danés Magnus Cort. Completaba este bloque de hornadas llanas la 3.ª etapa, y el guión no iba a cambiar. Dinamarca controlaba la carrera, en esta ocasión sin dejar al suizo Stefan Küng y al polaco Piotr Brozyna más de tres minutos de margen. A 3,5 de meta, con la carrera lanzada, hubo una caída que eliminó a sprinters como Ewan o Filossi, lo que hizo que el británico Daniel McLay encontrase menos oposición para levantar los brazos de nuevo por delante del danés Magnus Cort.
Con la carrera en un pañuelo, llegábamos a las cuatro etapas montañosas de esta edición. En la cuarta etapa el kazajo Ilya Davidenok, el neerlandés Sam Oomen, el polaco Przemyslaw Kasperkiewicz, el austriaco Lukas Postlberger y el esloveno Luka Kovacic fomaron la fuga que a la postre se acabaría jugando la etapa. El kazajo era uno de los hombres a seguir en esta edición, pero la caída del día anterior le hizo perder sus opciones y salió a por todas en Plateau de Solaison. Davidenok y Oomen llegaron de la mano a la parte final de la etapa en la que el kazajo expuso su potencial para superar a su rival y hacerse con la etapa. Por detrás Miguel Ángel López demarraba a dos de meta para finalizar tercero y situarse líder de la carrera.
A la 5.ª etapa llegaba Colombia con la intención de demostrar su poderío como bloque, y no permitió ninguna opción de fuga, salvo en un instantes a mitad de etapa en la que un grupo de 10 con el español Mikel Iturria consiguió alcanzar el minuto de ventaja, pero sin éxito. La etapa finalizaba en una subida bastante tendida, Marc Soler lo probó a 3 de meta sin éxito, y posteriormente el belga Dylan Teuns hizo lo propio consiguiendo llegar a meta con 8″ de ventaja sobre el pelotón. La sexta etapa de nuevo ofreció un asfixiante control por parte de la selección colombiana, que no permitió que ningún intento de fuga llegase a buen puerto, a pesar de que hubo movimientos por parte de una multitud de corredores en todo tipo de terrenos. En la última ascensión el líder Miguel Ángel López buscó culminar la exhibición de su selección, imponiéndose en meta al australiano Robert Power, que se situaba segundo en la general tras la etapa.
La última etapa era de apenas 100 kiómetros, pero con 3 puertos encadenados, lo que hizo que muchos corredores se lanzasen a tumba abierta y pusieran en serios apuros al líder. 8 corredores, entre los que estaban Marc Soler y el 8.º en la general, el belga Vervaeke formaron la fuga del día. El belga estaba a 1’49» del líder, e incluso durante parte de la jornada se colocó líder virtual de la prueba, lo que le dio alas para marcharse en solitario en busca de la hazaña. Colombia estaba contra las cuerdas, pero encontró la colaboración de Australia, que defendía los intereses de Power, y ello propició que la ventaja del belga empezara a menguar. En la subida final el propio Miguel Ángel López atacó para asegurar su liderato, provocando un corte con los cuatro primeros de la general en persecución del belga, que consiguió arribar a meta con algo más de medio minuto de ventaja sobre los hombres más fuertes de la carrera.
Con esta victoria Miguel Ángel López estampa su nombre en un palmarés dónde ya figuran los nombres de sus paisanos Nairo Quintana o Esteban Chaves entre otros, todo un logro que demuestra que la generación del ciclismo colombiano que está llamada a dominar el ciclismo mundial, llega para prolongar su dominio en el tiempo. Por parte de la selección española, la mala suerte en forma de caídas se ha cebado con el grupo, y a pesar de que se ha buscado el protagonismo metiendo a corredores en los cortes, se puede calificar la actuación de discreta.