Con solo 2,05 kilómetros de contrarreloj en todo el Giro Rosa 2014, las contrarrelojistas puras deben de estar tirándose de los pelos, pero los aficionados al espectáculo también lo estamos. Un prólogo por las calles de Caserta será la única oportunidad de ver a las ciclistas obre la cabra en toda la corsa rosa, en una jornada nocturna en la que el peligro estará muy presente y las primeras diferencias en la general podrían hacerse debido a los riesgos que puedan tomar unas ciclistas que no tomen otras. Las corredoras más potentes son, en principio, las más beneficiadas, así como las pistards velocistas e incluso las esprínteres más puras.
Nuestra apuesta: Annemiek van Vleuten (Rabobank-Liv)