Junio generalmente parece un mes poco ciclista, ya que tras la resaca del Giro y a la espera del Tour algunos pueden pensar que no puede haber entre medias gran cosa. Pues nada más lejos de la realidad y el mes en el que comienza el verano es un festival del ciclismo con la mayoría de los campeonatos nacionales disputándose en estas fechas, y con pruebas de una semana de máxima importancia como el Tour de Suiza y la histórica Dauphiné Libéré, renombrada desde hace cuatro años como Critérium du Dauphiné. La hermana pequeña de la Grande Bouclé tiene lugar en torno a los Alpes franceses, teniendo en su recorrido generalmente varios de los puertos que un mes después resultarán decisivos en la ronda gala, y siendo normalmente su podium muy significativo a la hora de realizar apuestas para el Tour, no obstante los dos últimos vencedores del Dauphiné, resultaron ser Bradley Wiggins y Chris Froome, a la postre triunfadores en París. Vencedores que cimentaron su triunfo en la crono individual larga que este año ha desaparecido por lo que los especialistas en la montaña han visto como las opciones de inscribir sus nombres en el palmarés aumentan considerablemente.
EDICIÓN 2013
La edición del año pasado fue más que nunca una previa del Tour, con los cuatro nombres que ya todos apuntaban para la victoria de la prueba de tres semanas francesa en la salida del Critérium du Dauphiné. el británico Chris Froome contra la “armada española” compuesta por Alberto Contador, Joaquim Rodríguez y Alejandro Valverde. Al final resultó que el espigado de Sky se merendó a la armada al completó y ninguno de los tres rivales estuvieron a la altura, siendo un “paseo” para Froome que tuvo en su escudero Richie Porte a su máximo rival secundándole en el podium, completando el mismo el español Dani Moreno. La primera corta etapa con salida y llegada en territorio suizo fue para David Veilleux que llegaba con casi dos minutos de ventaja sobre el pelotón a la línea de meta. Las dos siguientes jornadas sí vimos ambas llegadas masivas, siendo la primera de las dos para Elia Viviani y la segunda para Edvald Boasson Hagen. En la cuarta tuvo lugar la etapa que sentenciaría la carrera, una crono de 32 kilómetros en la que Tony Martin se llevó el triunfo por delante de Rohan Dennis que se colocaba líder, pero apenás con cinco segundos de ventaja sobre un Froome que superaba en casi tres minutos a Alberto y en más de tres minutos y medio a Valverde y Purito, por lo que la prueba salvo descalabró quedaba en manos del nacido en Kenia. Al día siguiente, Froome refrendó su estado de forma superior en la primera llegada en alto a Valmorel donde se lleva la etapa y se alzaba con el liderato, además superando a Contador en los últimos metros demostrando un poderío bestial. En la siguiente estuvimos a punto de ver a José Herrada hacerse con una victoria más que merecida pero en la fuga que llegaba a Grenoble, Thomas Voeckler fue el más listo superando en los últimos metros al manchego. La gran alegría española llegó en la séptima etapa con final en Superdévoluy en donde Samuel Sánchez conseguía el último gran triunfo de Euskaltel aprovechándose del golpe de pedal con el que llegaba tras la disputa del Giro. La última etapa con final en Risoul fue para un sorprendente Alessandro de Marchi que lograba no ser alcanzado por un Chris Froome que terminaba de nuevo soltando de amarillo a todos sus rivales, y encendiendo las alarmas de todos ellos de cara a un Tour en el que al final no encontraría rival.
RECORRIDO
Etapa 1: Lyon – Lyon, 10 km (CRI)
El típico prólogo para comenzar la carrera que es para auténticos rodadores aunque cuenta con un pequeño repecho en su parte central. Seguramente veamos vestirse ya como líder a uno de los gallos de la carrera.
Etapa 2: Tarare – Pays d´Olliergues-Col du Béal, 156 km
Primera etapa en línea y no habrá tiempo para tomarle el pulso a la carrera ya que de primeras finalizará en un puerto de categoría especial. Cinco puertos de segunda, tercera y cuarta categoría que serán la previa de los últimos 13 kilómetros de la etapa con la ascensión al durísimo Col du Béal con una media al 6,6% y con varios kilómetros por encima del 8%. Todos los corredores que quieran optar al triunfo deberán llegar muy metidos en la carrera si no ya desde el primer día dirán adiós a todas sus aspiraciones.
Etapa 3: Ambert – Le Teil, 194 km
Con los primeros 150 kilómetros por un auténtico terreno quebrado que seguramente permita que una escapada coja minutos y que terminan con la ascensión a un segunda como el Col de la Mûre desde cuya cima hasta meta quedarán más de 40 kilómetros completamente llanos donde le pelotón podrá reducir las diferencias si estos no se han ido muy lejos, así que puede ser que estuviéramos ante un día propicio para ver el primer sprint.
Etapa 4: Montélimar – Gap, 170 km
Etapa con final clásico del Tour. Se llega a Gap con el paso previo del Col de Manse, de segunda categoría quedando 12 kilómetros en descenso desde la cima hasta la meta. Hasta ahí la etapa resultará bastante cómoda para los ciclistas, aunque si los equipos de los velocistas no ven opciones de triunfo, un día como hoy una fuga de calidad tendrá mucho que decir pudiéndosela jugar en esa última ascensión, donde entre los gallos también podrían verse palos.
Etapa 5: Sisteron – La Mure, 184 km
Más de los mismo. De nuevo un día en el que controlar la carrera va a ser muy difícil ya que en esta ocasión se ascenderán hasta seis puetos de segunda, tercera y cuarta categoría, destacando los dos últimos, el Col de la Morte y la Côte de Laffrey de donde restarán unos 20 kilómetros hasta la meta. Terreno propicio para las fugas o para que se vea un grupo de hombres importantes muy seleccionado llegando a la meta.
Etapa 6: Grenoble – Poisy, 168 km
Los sprinters volverán a tener una buena opción para lucirse aunque los últimos kilómetros tienen trampas con dos cotas de cuarta y varios repechos de similares características en los últimos 25 kilómetros. A un kilómetro de meta hay uno de esos repechos donde se alcanza el 15% de desnivel, así que también habrá terreno para que algún valiente pruebe a desafiar a los velocistas.
Etapa 7: Ville-la-Grand – Finhaut-Emosson, 161 km
Etapa reina de esta edición. ETAPÓN con mayúsculas. Día para no perderse detalle. Sin ser una etapa excesivamente larga se ascenderán cinco puertos, uno de ellos de primera como el Col du Corbier, y con dos fuera de categoría enlazados en los últimos 40 kilómetros. Primero se ascenderá al Col de la Forclaz, de casi 13 kilómetros con una media del 8,2%, cuya dureza estará en la regularidad de este puerto con una pendiente muy mantenida durante toda la subida sin grandes picos pero sin apenas descanso. Para acabar la etapa se llegará a los más de 1900 metros de Finhaut-Emosson con un total de 10 kilómetros al 8% de media pero con varios kilómetros superando el 10% de desnivel y con los últimos cuatro kilómetros terroríficos donde se alcanzan rampas que superan con creces el 20%. Un día para que el que quiera llevarse la prueba de el todo por el todo.
Etapa 8: Megève – Courchevel, 131 km
Última etapa para que el ritmo no decaiga. Jornada muy corta con cuatro puertos puntuables, siendo tres de ellos de primera categoría, encadenándose los dos últimos en la parte final, siendo primero la subida a la Côte de Montagny con sus 8 km al 6,5% pero con rampas que alcanzan el 10% de desnivel, y para finalizar Dauphiné, la última ascensión a Courchevel Le Praz, de apenas 6 kilómetros al 6,2%, pero que no cuenta con un momento de respiro y que si la cosa no está del todo claro a estas alturas podrá deparar un auténtico festival de ataques.
PARTICIPACIÓN
Como suele ser habitual en esta carrera, la prueba estará entre los ciclistas que aspiran a llevarse el Tour y los que vienen con un estado de forma superior tras su participación en el Giro. En el caso de los primeros debemos situar tres grandes nombres, Chris Froome (Sky), que por el hecho ya solo de defender título partirá como el gran favorito, y que aunque este año no ha conseguido los registros de la temporada pasada ya demostró en Romandia que estaba de vuelta. El otro gran candidato al triunfo será Alberto Contador (Tinkoff-Saxo) que buscará devolverle la moneda de la edición del año pasado al británico. El de Pinto llega tras haber hecho un temporada prácticamente inmaculada con triunfos enormes en Tirreno-Adriático y Vuelta al País Vasco, aunque tras dos meses sin competir no sabemos realmente el punto en el que llegará el español. El tercero en discordia será Vincenzo Nibali (Astana) que decidió dejar esta año de lado el Giro para centrarse en el Tour, una apuesta muy difícil de tomar por parte de cualquier ciclista italiano. Nibali tendrá en Dauphiné una gran prueba de fuego de poder ver si está al nivel de los dos grandes favoritos al triunfo en Francia en el mes de julio. Un poquito por detrás de estos tres estará Michal Kwiatkowski (Omega Pharma-Quick Step). El polaco que realizó un comienzo de temporada excepcional tiene en esta carrera la oportunidad de demostrar su regularidad, algo que quizás todavía es lo que le ha faltado para dar ese salto a lo mas alto.
Entre los ciclistas provenientes del Giro, y aunque a priori cuenten con menor cotización en las casas de apuestas, está el sorprendente Wilco Kelderman (Belkin) que viene de hacer un gran Giro de Italia y que seguro que querrá demostrar estar en los momentos difíciles al lado de grandes ciclistas como Froome o Contador. Dani Moreno (Katusha) que aunque ha realizado un Giro más que discreto generalmente en esta prueba alpina de una semana muestra su mejor versión. Ryder Hesjedal (Garmin-Sharp) por algún momento en el Giro recordó al que nos deslumbró en 2012, así que por qué no verle en Dauphiné con los mejores.
Otros ciclistas a tener en cuenta en una edición donde la montaña tiene tanta importancia pueden ser Romain Bardet (AG2R-La Mondiale), Jacob Fuglsang (Astana), Tejay van Garderen (BMC), Damiano Cunego (Lampre-Merida), Jurgen van Den Broeck (Lotto-Belisol), Adam Yates (Orica-GreenEdge), Richie Porte (Sky), Thomas Voeckler (Europcar), Sylvain Chavanel (IAM Cycling) o Leopold König (NetApp-Endura).
Entre los españoles no solo estará Alberto Contador y Dani Moreno, aunque ello serán quienes partan con mayores opciones de darnos alguna alegría, pero no se puede descartar el papel de los hombres de Movistar, que tras llevarse el Giro se presenta aquí con Igor Antón como máximo referente. Un Igor que terminó la Corsa Rosa superior, dando miedo en el Monte Zoncolan, así que eso seguramente pueda aprovecharlo. Dani Navarro será el hombre principal de Cofidis, por lo que seguro que le veremos delante en los momentos importantes en la montaña. Beñat Intxausti (Movistar), Mikel Nieve (Sky) o Haimar Zubeldia (Trek Factory Racing) serán otros de los nombres de ciclistas españoles importantes presentes en la salida.
Para las posibles llegadas masivas tampoco desmerece el cartel que se presenta en el Crieterium du Dauphiné con especialistas como Arnaud Démare (FDJ), Thor Hushovd (BMC), la dupla de Orica de Simon Gerrans y Leigh Howard, Julien Simon (Cofidis) o Jonathan Hivert (Belkin).