Prestigio. Grandeza. Respeto. Espectáculo. Calificativos importantes, pero a su vez merecidos para el Memorial Valenciaga, una de las clásicas de mayor renombre del plantel aficionado, quinta cita de la Copa de España. Cristian Cañada, escalador del Mutua Levante – Delikia – Renault Ginestar, ha conseguido añadir una nueva prueba de entidad a su palmarés, batiendo en la rampa final de Isasi al pacense Alberto Gallego (Team Extremadura) y al gipuzkoano Antton Ibarguren (Telco’m Gimex), compañeros de batalla en los kilómetros decisivos de la carrera.
El buen tiempo ha acompañado a los 175 corredores que han tomado la salida en esta 43.ª edición, con cierto retraso, prevista para las 9:00 horas. Los rusos del Lokosphinx se han percatado de la necesidad de recuperar el tiempo perdido, y con la excusa del liderato de las metas volantes de Artem Samolenkov, han hecho de las dos primeras horas de carrera un paseo militar; los cuentakilómetros, a 60 km/h en varios tramos. Ha costado, pero poco antes de llegar a la parte dura de la prueba, 19 hombres han conseguido destacarse del pelotón. Mitxelena, Lizarralde, Sáez, Kaczmareck o Barrientos eran los nombres más destacados de una avanzadilla que, tras los pasos por Elgeta y Areitio, ha quedado despedazado por completo, siendo cazados los últimos integrantes en las primeras rampas de Ixua.
Comentario común de todos los participantes sobre el puerto de primera: dureza. Una dureza que ha impuesto el equipo Lizarte al comienzo de la subida, y que ha rematado Antton Ibarguren hasta la cima, imponiendo un fuerte ritmo y llevándose consigo a Alberto Gallego y Cristian Cañada. Por detrás, los de Manolo Azcona, que contaban con la presencia de Soler, Pedrero y el local Aitor González, no han podido acortar distancias, por lo que la ventaja del trío cabecero ha resultado decisiva. Con el triunfo por decidirse, los tres se han plantado en Eibar, apelando a la épica en un sprint cuesta arriba de 250 metros, en el que el conquense ha resuelto de maravilla la oportunidad de plasmar su nombre junto a ciclistas de la calidad de Mikel Nieve, Joaquim Rodríguez u Óscar Freire.
La alegría de Cañada contrastaba con la rabia de Antton Ibarguren, quien entraba en meta golpeando el manillar por la ocasión perdida ante su gente, o la cara de sufrimiento de un supercombativo Gallego, asomando la cabeza desde el primer alto de Meagas. Por su parte, Unai Intziarte ha sabido sufrir de lo lindo para mantener el maillot de líder, apoyado en la gran labor realizada por sus compañeros del Gipuzkoa – Oreki.
El Memorial Momparler, más conocido como la ‘Roubaix castellana’, será la siguiente cita de la Copa de España que deberán afrontar los corredores; los tramos de pavé serán determinantes para el devenir de la prueba. El 27 de abril está muy cerca.