Pascual Momparler, valenciano, 31 años, seleccionador nacional de ciclismo en carretera sub-23 y junior y todas las categorías de ciclocross desde el pasado mes de marzo. Antes de eso fue seleccionador de la Federación de Ciclismo de la Comunidad Valenciana, cosechando buenos resultados. Y antes ciclista. Buen amateur, corrió una temporada como profesional en el equipo italiano Miche, en 2003. Dentro de poco más de una semana se enfrenta a su primer Campeonato del Mundo, en la Toscana, como responsable de las categorías sub-23 y junior.
Afronta su primer mundial “más tranquilo de lo que esperaba, con la sensación de que el trabajo está bien hecho y que sólo la mala suerte nos puede privar de un gran resultado”.
Momparler llega a la cita más importante de la temporada muy motivado por los resultados obtenidos. “La verdad es que estoy muy satisfecho. Hemos conseguido el máximo de puntos y clasificar a cinco corredores para el mundial sub-23, logramos la medalla de plata en la contrarreloj individual de los Juegos del Mediterráneo y, lo que es más importante, hemos ganado el Tour de l’Avenir. Todo esto con el mínimo presupuesto… Pero de lo que más satisfecho me siento es de que en la selección se trabaje como si fuera mi propio equipo. Los corredores se sacrifican unos por otros como sí todo el año trabajaran juntos y esta tarea no es fácil de conseguir”.
Según el técnico valenciano, lo más difícil ha sido “tener que quitar de la lista a Txoperena y Pedrero, dos corredores que se dejaron la piel por la selección, y poner a uno nuevo. No ha sido fácil para mí, pero el recorrido exigía algunos cambios. Creo que llevo un equipo muy profesional para luchar por la victoria”.
Aunque es consciente de las dificultades que entraña una carrera como el mundial, los últimos resultados le hacen ser ambicioso. “En la prueba en línea lucharemos por la victoria. Espero que los aficionados vean a una selección ordenada, que sabrá estar en carrera. Nuestra baza es Rubén Fernández, que tras su victoria en el Tour de l’Avenir llega muy bien de forma y con mucha confianza. Luego contamos con Carlos Barbero, que puede darnos una agradable sorpresa. Hartiz Orbe, Mikel Iturria y Mario González serán los hombres de apoyo. Estos dos últimos correrán también la contrarreloj, prueba en la que lo tendremos un poco más complicado; firmaría con un puesto entre los diez primeros”.
Pascual Momparler lamenta la falta de equipos profesionales y las dificultades que tienen muchos buenos amateurs de dar el salto al campo profesional. “Tenemos muy buenos corredores en el campo amateur, somos una de las naciones con más nivel. Con más presupuesto y más trabajo no tengo duda de que seríamos de las mejores, igual que lo somos en la máxima categoría profesional”.
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