Anna Sanchis (Genovés, Valencia; 18 de octubre de 1987) es, probablemente, la ciclista española más conocida. Y ha hecho muchos méritos para serlo. Pero la mala suerte (y la mala leche) se ha cebado con ella. Todavía ni ha cumplido los 26 años, lo que quiere decir que le queda muchísimo en la élite.
En 2006 disputó su primer Giro de Italia, que concluyó en una discreta 69.ª posición. Tenía 19 años. Pero en 2008… lo petó. Fue séptima en la lucha por la maglia rosa de la ronda italian, que venció finalmente una imparable Fabiana Luperini.
En 2009 empezó su mala suerte. Su equipo, Safi-Pasta Zara-Titanedi la despidió por una lesión, razón (injusta) por la que no le pagaron el sueldo. A final de año, obviamente, abandonó el equipo. Durango-Bizkaia la fichó para la temporada siguiente, pero solo pudo correr una carrera UCI en todo el año. Para 2011 las cosas cambiaron y ya tuvo un calendario más aceptable… pero sin Giro.
La valenciana denunció a Safi-Pasta Zara-Titanedi por impagos, lo que hizo que la firma italiana, patrocinadora del Giro Donne, la vetara para correr la carrera. Hace cosa de dos meses, por fin, el caso se cerró y Anna ganó el juicio contra Safi. Bizkaia-Durango recibió la invitación a la prueba y se llegaron a plantear no correr en solidaridad con Anna, pero esta les hizo tomar la salida, aunque dejando en blanco el dorsal que debería haber llevado ella. Pese a ello, en el Nacional de crono fue segunda, por detrás de Eneritz Iturriaga.
2012 fue un año espectacular para Anna. La Durango-Durango la terminó en una magnífica undécima posición y, días después, concluyó novena la clasificación general de la Emakumeen Bira, habiendo perdido casi un minuto en la etapa reina por culpa de un pinchazo sin el cual habría sido séptima. Ganó los dos Campeonatos de España, tanto la crono como la línea; pero, pese a todo eso, su equipo no consiguió la invitación para el tan ansiado Giro de Italia. Hizo top 20 en la general del Trophée d’Or, fue 25.ª en la Copa del Mundo de Plouay y la mala suerte la volvió a perseguir en Limburgo. Sufrió un enganchón en la subida al Cauberg que la relegó de las posiciones de cabeza. Tenía el top 15 en las manos, pero la diosa Fortnua se volvió a cruzar en su camino.
En este 2013 empezó la temporada muy fuerte, logrando acabar De Ronde van Vlaanderen y la Flecha Valona. La Bira no la acabó por una caída (de nuevo la suerte), pero se recuperó y en el Nacional de crono revalidó título. Por fin pudo volver al Giro de Italia, esa carrera en la que la habíamos descubierto como ciclista allá por 2006. La general la acabó 16.ª, haciéndonos llegar a soñar incluso con el top 10. Y hoy se ha dado a conocer una noticia muy buena para Anna. Un notición. El Tour de Ardèche lo disputará en las filas del potente equipo belga Lotto Belisol. En esta carrera francesa logró el maillot de la montaña en 2012 y tiene este año serias opciones de hacerse con alguna victoria de etapa. Esta prueba también lo disputará Belén López y el resto del Lointek.
¿Y en 2014? Pues todavía no sabemos. Confiamos en que Bizkaia-Durango consiga un calendario mucho más amplio, con la entrada de alguna empresa privada al patrocinio. Y, si no, como nos dijo Anna en el especial de El Pelotón Radio dedicado al ciclismo femenino, no descarta irse al extranjero a correr.