Que Marianne Vos es la mejor ciclista del momento no lo duda nadie. Yo me atrevería a decir, incluso, que es la mejor de todos los tiempos (lo siento, Jeannie). Pero lo mejor es enemigo de lo bueno. Marianne tiene el poderío para ganar todo lo que se plantee. Y eso ya lo ha demostrado. Ha sido campeona del mundo, de los Juegos Olímpicos (en carretera y en pista), de la Copa del Mundo, del Giro de Italia, de la Flecha Valona, del Mundial de Ciclocrós, del Mundial de scratch y puntuación… Y tiene 26 años. Y tiene mucha más hambre de victoria.
A los 14 años empezó a disputar pruebas de ciclismo de montaña, pero un año después se pasó al ciclocrós. En la disciplina del barro destacó desde cadetes, y hasta el día de hoy, cuando sigue ganando cada vez que compite en ello. Ahora, a sus 26, la neerlandesa ha decidido que en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 tiene que ganar la prueba de montaña. Desde mi punto de vista, lo conseguirá de sobra. Marianne comentaba en una entrevista reciente: «Soy muy dinámica, pero no me gusta definirme en una especialidad concreta. Soy solo una ciclista, aunque creo que mi hábitat es el ciclocrós y la carretera». Y como bien dinámica que es, se ha propuesto el mountain bike.
Probablemente, la decisión de competir en montaña haya sido una de las causantes de su «mala» (entre comillas) actuación en el Giro. Porque una superclase como ella no puede permitirse el lujo de terminar sexta en la general de la corsa rosa. Cierto es que sus tres victorias de etapa y la maglia de la regularidad ya le dan sentido a su viaje a Italia, pero se queda corto para lo que puede llegar a lograr. Es evidente que Marianne tiene una mala planificación de la competición. No cuenta con un entrenador personal, ya que le despidió en 2008 porque él le instaba a no alternar carretera con pista. Pese a ello, ese año ganó el Mundial y los Juegos Olímpicos en puntuación; pero eso no le impidió vencer también en la carretera, alzando los brazos en la Bira, la Flecha Valona y el Campeonato Nacional, además de ganar el Ránking UCI.
Marianne Vos en el Cauberg; Mundial 2012 | © Stephill
Ahora bien, ¿son compatibles la montaña y la carretera? Vos ha demostrado que sí lo son, porque sin despegarse de las victorias en carretera, ha logrado una vuelta por todo lo alto al mountain bike. A Río llegará a tope de forma para lograr la victoria en las dos disciplinas (carretera y MTB). Pero Marianne necesita descansar. No ha parado de competir desde hace mucho. En invierno hizo toda la temporada de ciclocrós, consiguiendo unos resultados magníficos; y en marzo ya estaba de vuelta a las carreteras, donde alzó los brazos en la primera carrera que disputó. Todo este esfuerzo le ha causado daño en la Emakumeen Bira y en el Giro Rosa. Su próximo gran objetivo será la Route de France, donde tratará de volver a recuperar la senda del triunfo. Después, en septiembre, Lombardía verá a la neerlandesa luchar por el maillot arcoíris. Y en octubre, si no hay cambios, vuelta al barro. Y bucle eterno. Al menos, la pista la ha dejado, de momento. Pero no le demos ideas, que Marianne Vos es capaz de conseguir todo lo que se plantee.
Imagen destacada: © Anton Vos