«Hoy se trataba casi de sobrevivir porque ha sido el día más difícil en lo que llevamos de Tour. En una rotonda ha habido un frenazo fuerte y no me ha dado tiempo a esquivar al de delante. Había muchísima tensión por el viento y todo el mundo iba atacado de los nervios para que no le pillara ningún corte. Tengo un fuerte golpe en la rodilla izquierda y un poco en la muñeca pero no parece nada importante y espero recuperarme del todo para Pirineos. Durante la etapa me dolía bastante, pero sabía que podía seguir y que había que intentar no perder tiempo. Se nota que esta es una carrera distinta a todas porque el nivel y la tensión que hay aquí son enormes».
Fuente: Prensa Movistar Team