«Voilà, lo he conseguido. Llevo con ello en mente desde la etapa del pavé pero pese a ello lo que siento en estos momentos es indescriptible. Cuando era jovencito era algo con lo que no podía ni soñar, ¡me dejaban atrás en todas las carreras! Sabía que hoy tendría una oportunidad así que he querido sumarme como fuera a la fuga. He saltado sobre todo lo que se movía durante casi 40 kilómetros pero lo he conseguido. He tenido que pelear toda la jornada para aguantar arriba. No quería creérmelo hasta cruzar la meta.
Mañana, día de la fiesta nacional francesa, voy a lucir el maillot amarillo: es increíble, sencillamente increíble. Ahora bien, no será la etapa más sencilla para defenderlo. Es evidente que los favoritos van a intentar algo y solo cuento con 1’30” de ventaja. En cualquier caso, voy a darlo todo para conservar el maillot pues me gustaría poder lucirlo más de un día…»
Alain Gallopin: «Un maillot amarillo en la familia. Siento una emoción inmensa»
«Por lo general, os dirigís a mí cuando Fabian Cancellara gana la etapa, no cuando termina segundo…. Hoy siento una emoción inmensa… Ver un maillot amarillo francés no es tan habitual. Y un maillot amarillo en la familia Gallopin mucho menos. Llevamos ya 50 años en el mundo del ciclismo, hay Gallopins como quien dice en todas las carreras francesas y he aquí que nos encontramos con que uno de nosotros se enfunda el maillot amarillo.»
Tony es hijo de Joël Gallopin, hermano de Alain y de Guy, también antiguo corredor profesional. «Tony ya no corre para el Trek, sino en las filas del Lotto, pero le asesoro desde los campeonatos de Europa y del mundo júnior de 2006, cuando me cedió el testigo su padre. Ganó dos medallas de bronce y desde entonces confía en mí.»
Prensa Tour de France