El equipo ruso llega al Tour de Francia con un buen bloque liderado por Joaquim Rodríguez, que retorna a la competición tras la caída que tuvo en el Giro d’Italia. La inclusión de Purito, a pesar de no estar en su mejor forma, eleva considerablemente la calidad del bloque, que correrá con muy poco que perder esta carrera.
No tienen a ningún corredor con aspiraciones reales a la general, aunque si Purito va a más con el paso de los días, pueden llevarse alguna grata sorpresa. El catalán ha reconocido que a lo máximo que aspira en esta edición es a una victoria parcial, y que estará en la ronda gala con la intención de volver a la competición de cara a la Vuelta a España.
Junto a él, destaca un bloque que puede dar mucho que hablar en etapas de no mucha complicación orográfica, pero sí lo suficientemente dura como para eliminar sprinters. Krisoff —9 victorias este año, incluyendo la Milán-San Remo— será una de las bazas más significativa de los rusos, que contarán con Isaychev, Paolini, Porsev y Smukulis como principales apoyos en ese terreno, aunque también pueden jugar sus bazas en fugas, ya que Isaychev y Smukulis son dos corredores bastante habituales en los cortes.
En las etapas montañosas, a parte de la baza Purito, la suerte del equipo estará en las piernas de Špilak, Trofimov —ambos con victorias de etapa en Dauphiné— y Silin, que tendrán que seleccionar las etapas con opciones para las fugas para poder brillar, y visto lo visto en Dauphiné, saben muy bien tanto seleccionar, como resolver estos cortes.
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Joaquim Rodríguez | |
Vladimir Isaychev | |
Alexander Kristoff | |
Luca Paolini | |
Alexander Porsev | |
Egor Silin | |
Gatis Smukulis | |
Simon Spilak | |
Yuri Trofimov |
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