Llegaba la montaña al Tour del Porvenir y todas las espadas estaban en el aire. Hoy se pasaban dos puertos importantes, el Grand Cucheron y la Col de la Madeleine, donde finalizaba la etapa.
Obviamente hubo muchos intentos de fuga, pero la que cuajó tenía un invitado incómodo para el pelotón, el colombiano Chamorro, subcampeón de la carrera el año pasado, que jugó sus bazas ya que tenía tiempo perdido tras su caída en la segunda etapa. Hubo una gran pelea hasta que se llegó a pie del Grand Cucheron, donde Rusia puso sus hombres a tirar y subieron a un buen ritmo el puerto. En la parte final lo probó Orbe, que abrió hueco y se lanzó en solitario en el descenso, pero un problema mecánico le hizo perder la distancia que había obtenido.
Alaphilippe (Francia) había salido tras Haritz, por lo que se quedó en cabeza y estuvo rodando en solitario en el tramo que había entre ambos puertos. Al empezar el puerto Bélgica ponía a sus hombres a reventar el pelotón y así fue, cazaron al francés y dejaron el pelotón con unas 25 unidades. El líder belga Vervaeke se quedó, por lo que hubo un parón, momento que aprovechó Ruben Fernandez para iniciar su hazaña a 9 meta, bendita locura.
Svendsen (Noruega) intentó salir a por el murciano, pero Rubén sabía que no había que mirar atrás y así lo hizo, poco a poco fue poniendo tierra de por medio y no solo eso, poco a poco el pelotón se quedaba sin gente importante. El noruego acabó dejándose coger incapaz de coger a Rubén y a partir de ahí varios intentaron saltar del grupo de favoritos, pero esos arranques con sus posteriores parones, beneficiaban más y más al corredor de Caja Rural, que consiguió cruzar la meta con más de un minuto y medio sobre sus rivales.
No es una victoria cualquiera, Rubén hace 3 meses estaba en un quirófano con la clavícula rota, de hecho Ruben no debería de estar aquí, entró por la lesión de Mikel Iturria, pero el seleccionador habló con él y Ruben le prometió llegar en condiciones. Ha corrido la Vuelta a Portugal para preparar esta carrera y ha llegado con muy buenas piernas a esta carrera.
Quedan dos etapas, ambas de montañas, dos etapas para sufrir y disfrutar con el ciclismo español, que llega a un carrera sin un buen ranking en la Copa de las Naciones y de repente se ve con la carrera muy de cara. Seguiremos informando y esperemos poder contaros más alegrías.
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