El belga Greg Van Avermaet (BMC) se ha llevado la victoria en la 115ª edición de la París – Roubaix al superar en el velódromo de Roubaix al checo Zdenek Stybar (Quick Step) y Sebastian Langeveld (Cannondale – Drapac). Tom Boonen, en el día de su adiós, ha entrado el 13º y se queda con cuatro victorias en el Infierno del Norte empatado con Roger de Vlaeminck.
La carrera rodó muy rápida desde el primer kilómetro, con constantes ataques desde el pelotón. Los equipos de los favoritos no permitían las fugas, lo que hizo que no hubiera escapada larga, como venía siendo habitual en los últimos años. Cuando se acercaban los corredores al primer tramo de pavés, Mickael Delage (FDJ), Jelle Wallays (Lotto Soudal) y Yannick Martínez (Delko) saltaron del grupo, aunque este último se descolgó a los pocos kilómetros.
El nerviosismo se apoderó del pelotón y varias caídas afectaron a corredores importantes como Oliver Naesen (Ag2r) o Luke Durbridge (Orica – Scott). El belga sufrió un pinchazo kilómetros después de la caída y tuvo que ir a la contra durante toda la carrera, aunque pudo entrar en el grupo tras varios kilómetros.
A los dos corredores de cabeza se unió Stijn Vandenbergh (Ag2r) y dio un impulso a la fuga para mantener la esperanza, aunque el pelotón se les echó encima rápidamente. Al paso por el bosque de Arenberg, Sylvain Chavanel (Direct Energie) saltó del grupo y se llevó con él a Jelle Wallays, que venía de la fuga. Greg Van Avermaet sufrió un pinchazo antes de entrar en el bosque de Arenberg pero pudo enganchar kilómetros después de finalizar el mítico tramo de pavés.
Tras finalizar el tramo Wallers à Hélesmes, de cuatro estrellas, Peter Sagan y Maciej Bodnar (Bora Hansgrohe) atacaron a dúo y se llevaron a rueda a Daniel Oss (BMC) y Jasper Stuyven (Trek – Segafredo). Cuando los cuatro hacían camino, Peter Sagan sufrió un pinchazo que hizo retrasar al eslovaco al grupo del resto de favoritos. Jurgen Roelandts (Lotto Soudal), Dimitri Claeys (Cofidis) y Gianni Moscon (Sky) se unieron a la cabeza de carrera pero el pelotón los dio caza.
Daniel Oss volvió a marcharse en solitario exhibiendo gran fuerza y rápidamente cogió ventaja. Sebastian Langeveld (Cannondale – Drapac) y Roelandts saltaron tras el corredor del BMC. Tras ellos atacaron Zdenek Stybar (Quick Step) y Peter Sagan pero el eslovaco volvió a verse afectado por la mala suerte y una avería en su bicicleta le hizo descolgarse del grupo perseguidor. Tras el incidente del campeón del mundo, Greg Van Avermaet y Jasper Stuyven atacaron desde el pelotón y se unieron a los perseguidores de Oss.
En el pelotón se unieron 40 corredores y el BMC decidió parar a Oss para apostar por Van Avermaet. El italiano dejó todo lo que tenía para aumentar la diferencia entre el grupo y el pelotón y permitir que Van Avermaet se jugara la victoria con el resto de acompañantes. Cuando el sexteto cabecero llegó al Carrefour de l’Arbre, Van Avermaet arrancó e hizo que se quedaran en cabeza Stybar, Langeveld y él.
La victoria estaba entre ellos y Stybar y Van Avermaet se sabían superiores a Langeveld. El control entre ambos llegó hasta el velódromo. Tal fue ese control que Moscon y Stuyven llegaron al trío cabecero en la última vuelta pero nada pudieron hacer para disputar la victoria. El corredor del Quick Step lanzó primero el sprint y obtuvo una gran diferencia frente a Van Avermaet, pero el belga se recuperó y pudo batir al sprint a Stybar.
Van Avermaet se consolida así como el líder del adoquín este año. Sus victorias en la Omloop Het Nieuwsblad, Record Bank E3 Harelbeke, Gante – Wevelgem y esta de París – Roubaix, más el segundo puesto en el Tour de Flandes y en la Strade – Bianche le hacen el más fuerte en las pruebas de pavés.
Tom Boonen por su parte se despide del ciclismo profesional con una 13ª posición. Su sueño de conseguir su quinto adoquín y quedarse en solitario al frente de los corredores con más victorias en el Infierno del Norte no pudo hacerse realidad aunque demostró que la clase no se pierde al afrontar la mayoría de los tramos de pavés en cabeza del grupo donde se encontraba.
Una leyenda que se despide, el héroe belga dice adiós tras 16 temporadas como profesional con 4 París – Roubaix, 3 Tour de Flandes, 3 Gante – Wevelgem, 5 E3 Harelbeke, 6 etapas en el Tour de Francia y un campeonato del mundo. Un corredor que pasará a la historia como uno de los más grandes en las pruebas adoquinadas.