Todo sigue igual. La Vuelta a España continuará, este año, con la tendencia que ha caracterizado a la ronda española en los últimos años. Muchos finales en alto, “muros” por doquier y todo con el objetivo de mantener la emoción y la igualdad hasta el último día.
La carrera comenzará en Galicia. No sobre una batea, sino desde un Balneario, el de Laias. Una contrarreloj por equipos de trazado quebrado y 27,8 km con final en el Parque Náutico de Castrelo de Miño (Ourense). En contraposición con otros años, esta crono si marcará diferencias.
La segunda jornada partirá de Ourense y concluirá en Baiona. Un recorrido de 160 km quebrados pero que serán una de las pocas oportunidades que tendrán los velocistas. El Alto de Fontefría, de tercera categoría, servirá para coronar al primer maillot de lunares.
La tercera etapa ya marcará las primeras diferencias entre los favoritos. Recorrido rompepiernas y final en la siempre espectacular ascensión a Ézaro. El Alto Lestaio (8,3 km al 5,3%) y el Alto Das Paxareiras (9,3 km al 5,4%) abrirán boca antes de la traca final: el Mirador de Ézaro. 2 km al 14% y con rampas que alcanzan el 30%. Solo un gran corredor podrá alzarse con la victoria.
La cuarta jornada bien podría pasar por un recorrido propio del Macizo Central francés. Recorrido rompepiernas y final en el Mirador de Veixia (San Andrés de Texeido). 11 km de ascensión a 5% de pendiente media y rampas cercanas al 16%. Si la fuga tiene entidad bien podría llegar. Podría producirse un cambio de líder.
La quinta jornada concluirá en Lugo y será la más sencilla de las que se desarrollarán en Galicia. Los velocistas deberán aprovecharlo. La sexta etapa también transcurrirá por territorio gallego, pero esta vez con varias dificultades por el camino. Terreno pestoso e ideal para que un hombre como Luis León Sánchez pueda buscar la victoria en solitario sorprendiendo al grupo. Si llega a meta un grupo reducido, Valverde podría ser candidato al triunfo.
Tras siete jornadas en territorio gallego, la Vuelta a España se despide y marcha a Zamora, camino de Puebla de Sanabria. Una etapa con varios puertos de 3ª categoría y un final en descenso en el que solo un sprinter capaz de superar las ascensiones del día podrá optar al triunfo.
Octava etapa con inicio en Villalpando y final en la empinada ascensión a la Camperona. Comienza así una serie de cuatro finales en alto que bien podrían hacer la primera criba entre los opositores al maillot rojo. La etapa será absolutamente llana hasta la ascensión final. 8,5 km al 7,4% de pendiente media, con una parte final desafiante cuanto menos: los últimos dos kilómetros alcanzan una media del 18%.
La siguiente etapa llevará a los corredores hacia el Principado de Asturias. Varias ascensiones de tercera y segunda categoría con final en el Alto del Naranco (Oviedo). Podría ser un buen día para las fugas. Si los favoritos quieren abrir diferencias deberán endurecer la carrera en los últimos kilómetros 50 kilómetros.
Al día siguiente la que podría ser la primera gran jornada de montaña. Final en la mítica ascensión a los Lagos de Covadonga (ESP), precedida como de costumbre por la subida a El Fito (1ª). La montaña llega a la Vuelta.
Tras un día de descanso en Oviedo, los corredores afrontarán el que será el cuarto final en alto consecutivo: Peña Cabarga. Tras las victorias de Purito, Froome y Kiryenka, esta última en 2013, la Vuelta regresa a la cima cántabra. Siempre es sinónimo de espectáculo.
Sin un solo día de descanso, los corredores afrontarán la 12ª etapa. Final en Bilbao con doble paso por el Alto El Vivero (2ª), allí donde en 2012 Froome intentó, sin éxito, aguar la fiesta de Juanjo Cobo.
La 13ª etapa bien podría dar algún disgusto a los favoritos, y no solo por ser la decimotercera. Jornada rompepiernas previa al paso de los Pirineos con muros y más muros entre el País Vasco y Francia.
Al día siguiente la etapa reina. 196 kilómetros que discurrirán, íntegramente, por territorio francés. Los corredores, que partirán de Urdax-Dantxarinea, afrontarán tres ascensiones de primera categoría antes de la subida final a todo un mito pirenaico: el Col d´Aubisque. Por si fueran poco sus 16,5 km al 7,1 %, los corredores deberán ascender antes el Col Inharpu (11,5 km al 7,1%), el Col du Soudet (24 km al 5,2%) y el Col du Marie-Blanque (9,2 km al 7,5%). Solo los más fuertes podrán disputar la victoria de etapa.
Sin descanso alguno, los corredores abandonarán los Pirineos con un nuevo final en alto: Aramon-Formigal. Jornada corta de no más de 120 km que, tras los altos de Petralba (3ª) y Cotefablo (2ª), afrontará la ascensión a Formigal: 14,5 km, con varios descansos, y un media del 4,4%.
Tras varios días de montaña y etapas rompepiernas, los sprinters volverán a escena camino de Peñiscola. 156 km entre Alcañiz y la ciudad castellonense. Si han soportado el paso por los Pirineos disputarán el triunfo, sino, una fuga podría tener su opción.
El martes 6 de septiembre, los corredores disfrutarán la última jornada de descanso antes de las últimas y decisivas jornadas por la costa valenciana.
Al día siguiente, desde Castellón partirá la 17ª etapa. Será el penúltimo final en alto de la ronda española. Tras varias ascensiones de segunda y tercera categoría, los corredores afrontarán la inédita ascensión al Camins del Penyagolosa (Alto de Mas de la Costa). Un muro imposible de 4 km y una media superior al 10%. Rampas cercanas al 20% y un hormigón rugoso serán un “plus” que endurecerá aún más la ascensión final.
La siguiente jornada concluirá en Gandía. Una jornada, teóricamente tranquila, antes de los dos últimos días decisivos. La 19ª etapa será la única contrarreloj individual de esta edición. 37 km entre Xabia y Calpe, completamente llana, en la que favoritos deberán dar el máximo si quieren seguir en la pelea por el maillot rojo.
Como en años anteriores, la penúltima jornada será de montaña. 193 km entre Benidorm y el Alto de Aitana. Una subida no demasiado exigente y que obligará a los favoritos a endurecer la carrera desde el inicio: 21 km al 5,8 % que decidirán el maillot rojo de la Vuelta 2016 a la espera del paseo triunfal en Madrid.