Tras su exhibición de ayer Greg van Avermaet se ha mostrado muy relajado con el maillot de líder:
«Ha sido un día precioso para mí. Ha hecho bueno, era una etapa llana y el pelotón estaba tranquilo. Me gusta Francia cuando hace sol. He disfrutado del día y de nuestro paso por una región maravillosa, con unas carreteras espectaculares. ¿Qué más puedo pedir? He podido correr a la cola del pelotón, sin presión, y charlar tranquilamente con algunos de mis compatriotas, en nuestra lengua materna. Casi todos los integrantes del pelotón vinieron a verme y a felicitarme. Es verdad que también recibí muchos mensajes después de mi caída en el Tour de Flandes, pero estos son mejores. ¡Mi teléfono echaba humo! He recibido mucho apoyo y he visto muchísimas banderas belgas por la carretera. Espero que sigan estando mañana en la montaña. Todo el equipo está feliz: ellos por mí y yo por ellos. También es verdad que he acusado el cansancio de ayer. Hoy por suerte era una etapa fácil pero tengo que recuperar para lo que viene, que es lo realmente duro. Sé que cinco minutos pueden parecer mucho tiempo sobre el papel, pero en las montañas es muy poco. Será complicado mantener el liderazgo más allá de mañana pero el maillot amarillo es algo que peleas por conservar cada segundo. A ver hasta dónde llego».
Otro de los portadores de maillots, el líder de la montaña Thomas de Gendt no ha querido forzar en el día de hoy y se marca como objetivo la etapa de pasado mañana para conseguir aumentar su ventaja al frente de la clasificación de los lunares.
«La etapa de hoy no ha ido mal. Ha sido fácil defender el maillot de lunares. He intentado no malgastar energía pero los 190 km que había que recorrer no nos los quita nadie. Además he bajado varias veces a por agua para todo el equipo. Mañana será complicado meterse en la escapada pero espero que lo consigan las personas adecuadas y poder quedarme con los puntos frente a mis rivales. Mi objetivo es fugarme pasado mañana, mejor. Me gusta poder llevar un maillot diferente, teniendo en cuenta que solo hay cuatro en el Tour de Francia. También es bueno cambiar de bici de vez en cuando».
Por otro lado el más combativo del día ha sido el nipón Yukiya Arashiro muy contento tras haber superado la lesión que le ha lastrado todo el inicio de temporada.
«Mi idea esta mañana era intentar colarme en algún grupo, si se consolidaban los intentos de escapada. Pero al final he decidido atacar yo porque veía que había poco movimiento. Jan Barta se ha unido pero pensaba que seríamos más. Está claro que todo se complica siendo solo dos, pero estoy contento porque al menos lo he intentado. No había rodado mucho con mi maillot de la Lampre así que quería hacer algo. Después de mi accidente en Qatar [fractura de fémur] pasé 40 días sin subirme a la bici y luego retomé los entrenamientos durante 70 días. Mi regreso a la competición fue en el Tour de Japón. Ahora estoy totalmente recuperado y estoy en plena forma».