Jan Bakelants (ALM) ha demostrado ser de largo el más fuerte e inteligente en el Giro dell’Emilia, logrando una gran victoria atacando a 30 km de meta y resolviendo ante sus compañeros de escapada. Segunda victoria del corredor belga tras la obtenida en el Giro del Piemonte
La prueba comenzó a un ritmo bastante alto, superando los 50 km/h de media durante la primera hora de carrera. Tras unos primeros 60 km frenéticos llegó el parón, y con ello los primeros aventureros en obtener la permisividad del pelotón fueron Frapporti (AND) y Bideau (BSE). A por ellos saltaron en persecución Parra (CJR), Gavazzi (STH) y Duarte (COL), pero no consiguieron llegar hasta el dúo cabecero y fueron absorbidos por el pelotón, pelotón que no seguía rodando rápido y echó abajo la escapada a 45 de meta.
Tras esa neutralización surgieron nuevos ataques, quedando en cabeza Andrea Fedi (STH), Madrazo (CJR) y Antonio Nibali (NIP). Por detrás reaccionaban Bakelants (ALM) y Berlato (NIP), siendo el belga el único capaz de llegar hasta el grupo cabecero, en el que sólo aguantaba Madrazo junto a Fedi. Restaban dos vueltas y Bakelants en cada paso por San Luca demostraba un puntito más que sus compañeros de escapada. Desde el pelotón corredores como Meintjes y Kudus (MTN), Pellizotti (AND), Rebellin (CCC), Polanc (LAM), Pozzovivo (ALM), Prades (CJR), Zardini y Bongiorno (BAR), Finetto (STH) o Cunego (NIO) removían el avispero, formando un grupo perseguidor de los cuales Cunego, Polanc y Prades –finalimente 5.º– estuvieron a punto de llegar al grupo cabecero. Pero era tarde, Bakelants cumplió y demostró ser el más fuerte en esta 98.ª edición del Giro dell’Emilia.