Chris Froome (Sky) ha vuelto a ser un año después el más fuerte en la etapa reina del Tour de Omán de 147,5 kilómetros entre Bibdid y Jabal Al Akhdhar, con la ascensión final al duro puerto de Green Mountain de casi 6 kilómetros por encima del 10%. El actual rey del Tour de Francia ha vuelto a poner su ley en una dura subida donde ni Tejay Van Gaderen (BMC), ni Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick Step) pudieron hacer frente al ciclón keniata. Con la victoria Froome además, se coloca como líder de la carrera, y todo hace pensar que mañana será por segundo año seguido en vencedor del Tour de Omán.
La fuga del día ha estado compuesta por Sprengers y Van Hecke (Topsport Vlaanderen-Mercator), Canola (Bardiani) y Murphy (Unitedhealthcare), pero varias formaciones tomaron el mando del pelotón para echarla abajo con Cannondale, Omega Pharma-Quick Step y el propio Sky a la cabeza. Finalmente la fuga ha muerto a escasos 4 kilómetros del comienzo de la última subida, por lo que todo parecía que se iba a decidir entre los hombres fuertes en las duras rampas del Green Mountain.
Desde el comienzo de la ascensión, el equipo de Chris Foome ha sido el que ha tomado el mando de la carrrera imponiendo un fuerte ritmo que ha descompuesto el gran grupo, y que finalmente ha sido refrendado con el ataque de su líder, que se ha marchado en solitario para llegar a la línea de meta con 22 segundos de ventaja sobre Van Garderen, 33 segundos sobre Urán o 38 sobre Joaquim Rodríguez. La general queda de la misma manera, con Froome con una amplía ventaja sobre estos tres corredores por lo que mañana todo nos hace pensar que el corredor británico del Sky anotará una general más a su amplio palmarés.
Mañana, como decimos, última etapa del Tour de Omán de 146 kilómetros entre As Sifah y Matrah Corniche, con un recorrido habitual para homenajear a los vencedores de la carrera y para que se luzcan los velocistas en los metros finales.