2013 será el año en que veamos cómo se cumplen 100 ediciones de la carrera por etapas más grande del ciclismo. El Tour de Francia comenzará el 29 de junio desde donde nunca lo había hecho, en Córcega, para cumplir su centenar de comienzos, su centenar de llegadas, su centenar de desgracias y su centenar de glorias. Gloria que estará esperando 3 semanas después al corredor que más rápido haya cubierto los 3360 kilómetros que finalizan en un magestuosa París que esta vez dará la bienvenida a los corredores de noche. Final apoteósico para una edición tan especial.
Como digo la Grande Bouclé comenzará en junio, cosa que tampoco suele ser habitual, desde la isla de Córcega por primera vez en sus 100 años de historia. Comenzará de una manera poco habitual, ya que las tres primeras etapas tendrán lugar en esta isla del Mediterráneo con tres etapas en línea sin que en ningún momento tengamos que echar mano del cronómetro para ver los tiempos que realizan los corredores en un prólogo. La carrera saldrá de Porto Vecchio para finalizar los tres días en Córcega en Calvi, por medio quedarán Bastia y Ajaccio, y en tres días conoceremos prácticamente todos los recovecos de esta maravillosa isla. Etapas movidas, donde habrá tiempo para todo, sprinters en busca de la gloria, valientes desafiando el canibalismo feroz de los equipos de los velocistas ya que la segunda y tercera etapa presentan un perfil los suficientemente atractivo como para poner en jaque a las hordas de Cavendish, Degenkolb y compañía.
En la cuarta etapa, tras coger el barco para llegar a tierra firme en Niza, tendremos la primera de las cronometradas, en esta ocasión por equipos, una de las especialidades más espectaculares del ciclismo en ruta que suele dejar imágenes preciosas y donde ya veremos por primera vez a los favoritos batiéndose el cobre para empezar a marcar las primeras diferencias entre ellos.
Tras esto, pasos por Marsella, Montpellier y Albi, donde los sprinters tendrán mucho que decir y donde seguro que veremos las dosis típicas de nerviosismo de la primera semana del Tour a lo que se sumarán caídas que esperemos no dejen a nadie fuera de la lucha por nada. Como digo, tras esto 3 etapas camino de los Pirineos, donde una semana después de que comenzase la aventura en Porto Vecchio, los corredores se asomarán a la montaña de verdad. Pailhéres y Aix 3 Domaines quitarán las sonrisas de los rostros de los ciclistas que habrán disfrutado de cierta “calma” encima de la bicicleta hasta este momento. Un “Fuera de Categoría” para saludar a los corredores y es que Pailhéres es mucho puerto como para llegar con dudas a este punto de la carrera, para después acabar en el primer final en alto, Aix 3 Domaines donde veremos las cunetas a rebosar de aficionados dando su calor a los ciclistas que empezarán entre los favoritos a jugarse el todo por el todo. Al día siguiente maratoniana etapa de preciosos parajes por los Pirineos con Aspet, Menté, Peyresourde, Val Louron y La Hourquette como protagonistas. Casi nada para despedirnos de la Cordillera Pirenaica que este año 2013 se lleva la parte más “flojita” de la carrera.
El lunes 8 de julio los corredores disfrutaran de su primera jornada de descanso para coger el avión y poder irse al noroeste. La Bretaña francesa les estará esperando con muchas trampas. Saint-Malo seguramente verá la llegada de los más rápidos, previo a la contrarreloj de Mont Saint Michel donde ya veremos diferencias importantes entre los hombres que pugnen por la general. Preparen las cámaras porque la llegada a meta no tendrá desperdicio.
De aquí iremos cruzando de esquina a esquina Francia rumbo a los Alpes. Tours de nuevo coronará a algún velocista, y en Saint-Amand Montrond tocará más de lo mismo, para llegar a Lyon donde una fuga seguramente tendrá mucho que decir. Y de aquí de nuevo al cielo. El día de la fiesta nacional francesa, 14 de julio, los corredores deberán subir al mítico Mont Ventoux para celebrarlo. Comienza lo duro de verdad de este Tour y aquí ya no habrá momentos para escatimar con los esfuerzos. Ventoux es mucho Ventoux, y en sus rampas muchos desearán haber sido médicos o fontaneros.
Al día siguiente los ciclistas tendrán una nueva jornada para reflexionar sobre si seguir encima de una bici o no como modo de vida (fuera de bromas no creo que haya muchas cosas mejores), y tras 24 horas de “relax” comienza el Tour en estado puro, 5 días seguidos para no pestañear. El martes 16 nos encontraremos con el final en una ciudad con cierto sabor amargo para la afición española, ya que camino de Gap, Beloki se dejó su carrera. En esta ocasión a 12 kilómetros de la meta coronarán el Col de Manse para ir saboreando la Cordillera Alpina. El miércoles la última de las tres cronometradas, en este caso de un perfil atípico totalmente debido a las dos cotas de segunda (Côte de Puy-Sanières y de Réallon) que deberán ascender en los 32 kilómetros de contrarreloj individual entre Embrun y Chorges. De aquí ya debería salir un líder sólido que tendrá que aguantar las emboscadas y escaramuzas que le prepararán sus rivales en las tres jornadas siguientes de auténtico infarto.
Primera de ellas y por la que llevaremos casi un año esperando, el final con doble paso en Alpe d´Huez. Este tipo de regalos ni los Reyes Magos. Si este puerto ha sido determinante cada vez que se ha subido, ¿qué podrá deparar con dos ascensiones en apenas 60 kilómetros? Al día siguiente nos vamos a Le Grand-Bornand, y eso es sinónimo de “puertacos” de los que nunca acaban como es el caso del Col du Glandon o la Madeleine, para acabar con 3 puertos en 60 kilómetros, el último de ellos el Col de la Croix Fry, de primera categoría a tan sólo 12 kilómetros de la llegada. Y para acabar, como postre final, al última etapa con final en alto en Annecy-Semnoz, de nuevo otro fuera de categoría donde se cerrará este Tour 2013. A estas alturas puede que la carrera esté finiquitada, pero si no… ¡qué duelo más bonito nos espera previo al paseo nocturno por París al día siguiente!
Es decir 21 etapas donde podremos disfrutar de vertiginosos sprints, de los especialistas contra el crono haciendo de las suyas, de valientes gregarios luchando por llevar a buen puerto una fuga y de capos luchando una y otra vez en los puertos más duros (hasta 64 puertos puntuables deberán superar en 21 días) del panorama ciclista, con un nombre propio sobre todos ellos, Alpe d´Huez. A priori, lo único que podemos decir es que nos vamos a divertir.